El vicesecretario de Organización y Electoral del PP, Carlos Floriano, ha tildado de “chisme” la información publicada este martes en CANARIAS AHORA sobre las declaraciones realizadas en 2009 por el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, en las que reconocía en sede judicial que el Grupo Parlamentario Popular en Canarias pagaba en efectivo o en talón un sobresueldo de 600 euros mensuales a sus diputados.
“Me saca una cosa de Canarias en la que dicen que dijo que se daban 600 euros. No le voy a decir que es una puñalada trapera, pero me parece un chisme”, ha contestado Floriano al ser cuestionado sobre esta información en una entrevista en la Cadena SER.
El “chisme” al que se refiere Floriano figura en las diligencias previas del denominado caso Salmón, por el que Soria estuvo imputado por un delito de cohecho. La declaración de Soria, la segunda que prestó durante la instrucción de la causa, tuvo lugar el 4 de mayo de 2009, cuando ocupaba el cargo de Vicepresidente del Gobierno de Canarias y consejero de Economía y Hacienda.
La admisión por parte de Soria del cobro de sobresueldos procedentes del PP se produjo en la respuesta a la segunda cuestión del fiscal Anticorrupción, Luis del Río, quien le inquirió acerca de la procedencia del dinero en metálico con el que decía pagar las vacaciones al empresario noruego Bjorn Lyng, propietario del complejo Anfi del Mar, en Gran Canaria, y por las dietas que cobraba.
El actual ministro de Industria contestó que lo recibía “de algunas empresas públicas” cuyos nombres “no podía decir porque no lo recordaba” y que de algunas de ellas los cobraba en efectivo y, en otras, mediante transferencia. En la misma respuesta, Soria reconoció que “desde junio de 2003, el Grupo Parlamentario Popular pasa a cada miembro del Grupo un talón o efectivo por importe de 600 euros mensuales”. Concluía afirmando que la fuente más importante de ingresos que tenía en efectivo eran “talones cobrados en ventanilla, reintegros de cajeros y los honorarios profesionales de su esposa”.
El caso Salmón, que fue archivado en 2009, investigó la relación entre el viaje de Soria y sus vacaciones en el complejo del empresario noruego con la tramitación de solicitud de Anfi en el Cabildo de Gran Canaria, institución que Soria presidía en la fecha de los hechos denunciados, para que interesara al Parlamento de Canarias la declaración de interés general de la urbanización y permitir así la construcción de 3.600 camas turísticas.El fiscal dio el caso por prescrito, aunque apreció la comisión de un delito de cohecho impropio.