El eurodiputado Juan Fernando López Aguilar ha presentado este lunes su precandidatura para las primarias del PSOE de Canarias con una apelación directa a los militantes porque solo los socialistas pueden evitar veinte años más de gobierno de CC y PP liderando una alternativa de izquierdas.
Tras presentar la documentación para concurrir a secretario general del PSOE canario, para lo que necesita al menos el aval del 10% de la militancia, López Aguilar defendió un mensaje “distintivamente socialista”, nada de silencios “o campañas flojas para no molestar” a aquellos con los que eventualmente se quiere pactar.
“No concibo un PSOE fragmentado”, dijo López Aguilar, quien se mostró dolido porque hace mucho tiempo que no ve en las reuniones a todo el partido, sino a fragmentos, y por eso se postula para integrar a todos.
El precandidato aseguró que su candidatura llegará hasta el final con una vocación de confluencia de todo el partido y de sus votantes, de los que están, de los que se han ido a otras fuerzas políticas y de los que fueron expulsados o invitados a irse.
También apostó claramente por definir las posiciones del partido en asuntos cruciales en los que la sociedad no sabe muy bien qué defienden los socialistas, y citó los ejemplos de la reforma del Estatuto de Autonomía, la reforma electoral o la “posición zigzageante” en la ley del suelo “en función de si se quiere complacer o disgustar” Coalición Canaria.
“Queremos poner a CC en la oposición y marcar la hoja de ruta, asignar nosotros los presupuestos”, no acompañando a otros en el gobierno ni sufriendo las arbitrariedades de la Consejería de Hacienda “para hostigar a los consejeros socialistas”, explicó López Aguilar, que presentó su candidatura en la sede regional del partido acompañado de dos decenas de militantes.
Liderar la izquierda y gobernar Canarias son los dos mensajes que López Aguilar se propone trasladar a los militantes, a cuyo encuentro acudirá en todas las agrupaciones posibles en todas las islas, para decirles que son ellos los que deciden libremente entre las distintas opciones, “sin instrucciones ni acarreos” de avales y “sin etiquetas maniqueas”, porque el respeto a la pluralidad está en la base de las primarias.
“Venimos de un periodo de debilitamiento”, caracterizado por menos militantes, menos votos y menos escaños, y por eso hay que recuperar el partido como la casa de todos, también de los que se fueron o los echaron.
Para López Aguilar, el sistema político canario de los últimos 25 años está caracterizado por el gobierno permanente de ATI-CC, que va cambiando de socio en función de a cual es más débil para repartirle “migajas”, aquellas áreas que no le interesa gestionar.
Ahora le toca volver al PP y si el PSOE no es capaz de liderar una alternativa desde la izquierda con las fuerzas progresista durarán otros veinte años.
“Solo nosotros podemos evitarlo y derrotar a ATI y al PP”, insistió López Aguilar en su apelación a la militancia, a la que recordó que los que deciden ahora el rumbo del partido son los afiliados en las primarias, y no “los cargos que se reúnen con cargos para repartir cargos”, como ocurría antes.
Garantizó que él busca la confluencia “activamente” con un mensaje claro, ante “la desolación de muchos de los que nos miran y ven un partido dividido, sumido en un largo silencio y desdibujado” ante asuntos claves como la fiscalidad, la gestión del suelo, el medio ambiente, la dignidad en el empleo y las prioridades presupuestarias.
Por eso aseguró que su candidatura llegará hasta el final, para dar opción de elección a los militantes y movilizar al partido aunque se haya programado la votación en periodo prevacacional, el 23 de julio.
López Aguilar dio por hecho que quien asuma la secretaría general deberá estar disponible para ser candidato autonómico en las elecciones de 2019, aunque eso se decidirá en otras primarias abiertas a militantes y simpatizantes.
Consideró que ahora la situación es muy diferente a 2007, cuando ganó las elecciones pero sin mayorías suficiente para gobernar ante el pacto de CC y PP.
Entonces no eran los militantes los que decidían, y él sufrió presiones para bajar el pistón frente a CC y el PP para que así el PSOE pudiera “tocar poder”, a lo que se negó, explicó.
Ahora son los militantes los que mandan y deciden si quieren o no que el PSOE “haga una campaña flojita para no molestar a ATI” por ver si se pude pactar tras las nuevas elecciones.
Ahora hay una oportunidad de construir un diálogo con las fuerzas progresistas “y no quiero que se nos pase la oportunidad de que la alternativa sea liderada por nosotros”, insistió.