El vicepresidente y consejero de Economía, Industria, Comercio y Autónomos del Gobierno de Canarias, Manuel Domínguez (PP), ha subrayado este viernes que el ejecutivo se propone impulsar la “industrialización de la construcción”, de manera que en un contexto de “emergencia habitacional” se acelere y agilice la ejecución de viviendas.
El objetivo es ahorrar tiempo en la ejecución de las viviendas, así como que sean más sostenibles y con la misma calidad que las construidas con materiales ordinarios, ha explicado Domínguez en una comparecencia en comisión parlamentaria para hablar de la Estrategia de Desarrollo Industrial de Canarias de 2022 a 2027.
Domínguez ha puesto especial énfasis en la necesidad de que el desarrollo de la industria en Canarias incorpore paralelamente medidas de descarbonización como en el resto de los sectores.
Sobre todo porque es imprescindible demostrar a la Unión Europea la voluntad del archipiélago para avanzar en una economía más verde para así aspirar a excepciones en los derechos de emisión del transporte marítimo con las islas, argumentó.
Excepciones en los derechos de emisión
La incidencia de los derechos de emisión en el coste de los transportes es muy peligrosa para la actividad de los puertos canarios en beneficio de los del continente africano y en detrimento de la economía de las islas, expuso Domínguez.
“Instalar una industria en Canarias tiene un coste superior de un 27% a hacerlo en suelo continental europeo”, dijo el vicepresidente, y por eso hay que actuar para impedir que los costes por los derechos de emisión en el transporte marítimo sean un inconveniente más.
Descarbonización
En esa línea de avanzar en la descarbonización de la industria, el vicepresidente citó el interés por industrializar la construcción de viviendas, así como mejorar la integración ambiental de la industria canaria.
Con ese objetivo, según Domínguez, se han aprobado la reciente línea de subvenciones para la regeneración y dinamización de las áreas industriales, con planes de movilidad, aparcamiento, zonas verdes y de ocio y, en general, caminar hacia parques tecnológicos y empresariales, superando el concepto de los clásicos “polígonos industriales”.
En cuanto a las subvenciones para la modernización de pequeñas y medianas empresas industriales, se incorporan novedades a favor de la economía circular y la “ecoinnovación”, además de promover la instalación de industrias en las islas no capitalinas y en los municipios de menos de 20.000 habitantes.
El consejero indicó que el actual gobierno no ha querido cambiar la Estrategia de Desarrollo Industrial de Canarias de 2022 a 2027, desarrollada por el anterior ejecutivo, porque es participativa, realista y alcanzable, es buena, y a la vez su desarrollo se aborda de forma dinámica para adaptarse al rumbo de la economía canaria.
En sus dos primeros años de aplicación, 2022 y 2023, se han cubierto más del 80% de los ejes, actuaciones y medidas previstas, y ahora se trabaja para alcanzar los objetivos finales para 2027, que incluyen entre otros que la industria represente el 7,7% del PIB, frente al 7,2% actual, algo factible.
También se persigue aumentar el tamaño de las empresas, ampliar el tejido manufacturero, desarrollar actividades de base tecnológica, aumentar el empleo industrial y su valor añadido, la integración ambiental del sector, su internacionalización, adaptar la formación a las necesidades de las empresas o impulsar la incorporación de más mujeres.