¿La hora de Clavijo?

Las prisas ya nada disimuladas del sector crítico a Paulino Rivero llevaron esta misma semana a la diputada nacional de Coalición Canaria Ana Oramas a anunciar que antes de concluir el mes de junio habrá un candidato consensuado para presentarse a la Presidencia del Gobierno en las elecciones de 2015.

Todos dan por sentado, tanto los críticos como los afines a Rivero, según han confirmado a Canarias Ahora, que ese candidato será Fernando Clavijo, el secretario general de CC en Tenerife y alcalde lagunero, pues la propia Oramas es muy rechazada en Gran Canaria y no cuenta con todos los apoyos necesarios en el resto, por verla muy vinculada a la “antigua ATI”.

Sin embargo, esta insistencia de Oramas ante los micrófonos de Radio El Día no ha sentado demasiado bien entre los adversarios a Rivero, pues algunos consideran que hay que ser más sigiloso y no dar al sector oficial capacidad de maniobra.

“Que Clavijo sea candidato oficial contra Rivero casi tres meses antes de la reunión del 12 y 13 de septiembre es dejar mucho tiempo a los otros para contrarrestar la estrategia y maniobrar para conseguir el número suficiente de apoyos para que repita el actual presidente”, han confirmado varias fuentes.

Varios handicaps

Pero no solamente dejar demasiado pronto de estar 'tapado' es un handicap para Clavijo, sino que sus apoyos en otras islas dependen de lo mismo por lo que no los ha tenido Oramas.

Los críticos insisten, como la diputada nacionalista, en que la alternativa a Rivero “debe liderar un espíritu de renovación, pasión e ilusión, y no se trata solo de quitar a uno para poner otro, sino de un nuevo ideario de nacionalismo canario de lo que debe ser el ejercicio de gobierno”.

“¿Y qué nuevo ideario pueden poner sobre la mesa Manuel Hermoso, Ricardo Melchior o la propia Oramas?”, se preguntan los aún no decantados.

Ni siquiera convencen los intentos por que haya una confluencia electoral con Nueva Canarias (NC), como lo demuestra el almuerzo que mantuvo su líder, Román Rodríguez, con el alcalde José Manuel Bermúdez en el santacrucero restaurante Don Pelayo.

Si bien es cierto que NC sería más proclive a pactar con CC si a su frente no está Rivero (lo que alienta a los críticos), no hay que olvidar que los antipaulinistas no esconden su predisposición a cerrar acuerdos con el PP, lo que aleja también a NC en un momento en el que su estrategia pasa por convertirse en una verdadera alternativa de izquierdas, una especie de Podemos nacionalista.

Por no hablar de que quienes están en contra de Rivero fueron los que más pusieron de su parte para que Rodríguez no renovase como candidato a la Presidencia en 2003 y, posteriormente, para que NC se escindiera de CC.

Y también está el asunto de la alternancia, que aunque ya no existe en los estatutos y reglamentos de CC, se mantiene vivo en el inconsciente colectivo de CC. “En los últimos 20 años, solo durante cuatro hubo un presidente del Gobierno que no fuera de Tenerife. Si hay que cambiar a Rivero, que sea por alguien no tinerfeño. Si el cambio es por otro tinerfeño ¿qué más da?”, afirman.

El petróleo, factor clave

Además, tanto Clavijo como Melchior han reiterado estar a favor de las prospecciones petrolíferas, un auténtico anatema para los nacionalistas de Lanzarote y Fuerteventura, que apoyan a Rivero precisamente por su férrea postura en contra.

Sin olvidar que Fernando Bañolas, lírica de los críticos granacanarios, está pensando en presentarse como alternativa a Rivero y Clavijo, aunque muchos son los que dicen que no tanto para convertirse realmente en candidato sino para neutralizar a Gran Canaria, donde Rivero cuenta con apoyos, y evitar que éste repita.

Todas estas consideraciones bullen en las cabezas de críticos y oficialistas, hasta el punto de que los primeros sopesan retrasar más allá de la fecha dada por Oramas la proclamación de Clavijo como alternativa a Rivero.

Y es que recuerdan que CC adoptó la decisión de permitir la presentación de precandidatos sin necesidad de contar con los avales requeridos por sus estatutos para formalizarla hasta el 5 de septiembre.

A partir de ese día, y hasta el 11 del mismo mes, los que hayan dado el paso podrán llevar a cabo reuniones con los miembros de la cúpula de la organización y celebrar reuniones en las distintas islas a fin de conseguir, como mínimo, un 20% de avales de los miembros del propio Consejo Político Nacional.