La ponencia de la reforma electoral se reúne el 1 de junio para tener “cuanto antes” una propuesta
Será a puerta cerrada sin sesiones públicas,como normalmente se reúnen las ponencias, pero los grupos parlamentarios han acordado 'ponerse las pilas' con el fin de que la reforma electoral esté aprobada “cuanto antes”, por lo que la primera reunión de la ponencia que emitirá el dictamen se reunirá el 1 de junio.
Aunque este “cuanto antes” tampoco concita el consenso, pues mientras que los grupos Socialista, Podemos y Nueva Canarias (NC) apuestan por que el pleno del Parlamento apruebe el nuevo sistema en un pleno extraordinario “antes de agosto”, tanto el presidente de la Comisión, el nacionalista Antonio Castro, como Emilio Moreno (PP) y Casimiro Curbelo (ASG) creen que será “muy difícil poder habilitar días del mes de julio”, lo que retrasará a septiembre el apoyo plenario al nuevo modelo.
Por ello, Luis Campos (NC), ha propuesto que “la ponencia se reúna cada semana, no cada 15 días, como ha sucedido con la Comisión, ya que la componen menos miembros y hay menos actividad parlamentaria”, mientras que el socialista Ignacio Álvaro Lavandera ha dado 'otra vuelta de tuerca':“debemos reunirnos cada vez que sea necesario, no solo una vez a la semana, igual que ha pasado con la ponencia de la Ley del Suelo debe pasar con la reforma electoral”.
El presidente de la Comisión ha estado de acuerdo en que “hay que aprovechar el tiempo haciendo cosas que nos hagan avanzar”, pues en opinión de Castro, “hay que tomar decisiones políticas huyendo de la ambigüedad para poder avanzar”, aunque insistiendo en que tanto habilitar julio como la frecuencia de las reuniones dependerá de que todos los ponentes estén disponibles.
Con todo, se ha decidido que el 1 de junio la ponencia se reúna para acordar el calendario e inicie la elaboración de un texto resumen sobre la opinión vertida por los 22 expertos que en las pasadas nueve sesiones han vertido sus análisis. A su vez, y en contra de la opinión de NC y de CC, tampoco será obligatorio que los distintos grupos presenten “ya sea oralmente o por escrito” sus propuestas de reforma electoral, aunque sí ir avanzando en los puntos de encuentro: mejorar la proporcionalidad, rebajar los topes y que esté vigente para las elecciones de 2019.
“La mayor parte de los grupos tiene clara su posición, ahora hay que buscar el máximo consenso posible”, afirmó Lavandera, mientras que Campos insistió en que “ver, analizar y debatir los elementos comunes de cada grupo, allanaría el camino” y la portavoz de Podemos, Noemí Santana, incidió en que el Parlamento “habilite un portal abierto a la ciudadanía para que también conozcan los documentos y puedan dar su opinión y, si al final, pudieran votarlo, sería maravilloso”.