Las batidas ordenadas por el Cabildo de Gran Canaria para controlar la presencia de cabras asilvestradas en espacios protegidos del este de la isla costaron a la institución 17.090 euros, según ha respondido la Consejería de Medio Ambiente, que dirige Juan Manuel Brito (Podemos), al PP.
En un comunicado, el grupo popular especifica que las batidas con rifles de largo alcance realizadas durante el pasado mes de noviembre en los espacios naturales de Inagua, Guguy y Tamadaba se saldaron con la muerte de 73 animales y costaron a las arcas insulares 7.490 euros, mientras que la campaña desarrollada en el pasado abril supuso un gasto de 9.600 euros.
Los tiradores profesionales contratados por el gobierno de coalición NC-PSOE-Podemos para erradicar las poblaciones de ganado asilvestrado en Gran Canaria dieron muerte mediante disparos con armas de fuego a 213 ejemplares.
En opinión del portavoz popular, Felipe Afonso El Jaber, la “matanza indiscriminada” de estos animales, además de “herir la sensibilidad de miles de personas”, ha supuesto un “elevado gasto” de dinero público que bien podría haberse destinado a atender “otras necesidades más urgentes” de los grancanarios.
“Al final se ha demostrado, como sostenían muchos expertos y colectivos de la isla, que existen otras alternativas menos crueles y sanguinarias que las matanzas a tiros para el control de la población de cabras asilvestradas en los espacios naturales protegidos, así como para la preservación de la rica biodiversidad de Gran Canaria”, concluye el consejero popular.