Cómo afrontar el síndrome de ‘la silla vacía’ en Navidad: “Hay que darse permiso a sentir”

El Colegio Oficial de Psicología de Santa Cruz de Tenerife recomienda “darse permiso a sentir” para afrontar el síndrome de la silla vacía, que tiene mayor presencia durante las fiestas navideñas.

Este síndrome se hace patente a través de una sensación de tristeza y nostalgia que se agudiza en esta época del año como resultado de un proceso de duelo, señala el Colegio en una nota.

En palabras de la psicóloga colegiada y portavoz del Colegio Oficial de Psicología de Santa Cruz de Tenerife, Azucena Duque, “los procesos de duelo no son lineales y, como tal, hay determinadas épocas del año en los que este se acentúa, lidiar con una pérdida durante estas fiestas puede suponer todo un reto para muchas personas”.

En su opinión, “es importante que tengamos presente que, aunque lo parezca, nada es una obligación durante la Navidad, creemos que debemos estar felices y con una agenda repleta de encuentros sociales y celebraciones, pero si nuestra salud mental no nos lo permite hay que saber reconocerlo y, sobre todo, permitirlo”.

Duque explica que es vital saber anteponerse a los “debería” autoimpuestos sobre el qué hacer o cómo estar durante la Navidad.

“No pasa nada por cambiar de actividades, rutinas, o buscar nuevas tradiciones que no nos recuerden tanto a la persona que falta”, señala.

Asimismo, Duque recomienda buscar siempre una red de apoyo entre amigos y familiares que permitan expresar con claridad los sentimientos que van aconteciendo.

“Si necesitamos pedir ayuda profesional es muy importante hacerlo, pero primero hay que intentar también apoyarse en los seres queridos y dar voz a esos sentimientos que nos llegan y no sabemos gestionar, ya que saber validar estas emociones y nuestro proceso será clave para también poder estar presentes en estas fiestas sin culpa o con menos tristeza”, apunta.

Así, indica que “una herramienta muy útil para gestionar el síndrome de la silla vacía es establecer un tiempo o momento de retirada, donde la persona que lo sufre se dé permiso a extrañar libremente a esa persona y transitar por todas las sensaciones que le asalten sin juzgarse o sin intentar imponerse la supuesta felicidad que debemos sentir en Navidad”.

Desde el Colegio Oficial de Psicología de Santa Cruz de Tenerife recuerdan la importancia de acudir a un profesional especializado y colegiado con el que establecer pautas individuales que ayuden a salvaguardar la salud mental.