Ingrid Betancourt, Premio Príncipe de Asturias de la Concordia 2008

La política Ingrid Betancourt, recientemente liberada tras permanecer secuestrada durante más de seis años a manos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), ha sido galardonada este miércoles en Oviedo con el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia 2008.

Betancourt se ha impuesto en las votaciones finales del jurado a las candidaturas del Colegio de Europa, con sede en Brujas (Bélgica), y del jesuita español Enrique Figaredo, que trabaja en Camboya desde 1991 y que ha hecho de su vida una cruzada contra las minas antipersona.

El jefe del Ejecutivo asturiano, Vicente Álvarez Areces, en su calidad de presidente del jurado, fue el encargado de leer el acta, en la que se destaca que Ingrid Betancourt “personifica a todos aquellos que en el mundo están privados de libertad por la defensa de los derechos humanos y la lucha contra la violencia terrorista, la corrupción y el narcotráfico”.

El jurado subraya en su acta que, “al destacar la fortaleza, dignidad y valentía con las que Ingrid Betancourt se ha enfrentado a seis años de injusto cautiverio, quiere solidarizarse con todas aquellas personas que padecen las mismas dramáticas e inadmisibles condiciones que ella ha sufrido, así como con aquellos gobiernos que, al igual que el de la República de Colombia, trabajan por la consolidación del sistema democrático y las libertades cívicas”.

La candidatura de Ingrid Betancourt estaba avalada por los Premios Príncipe de Asturias Muhammad Yunus, Vicente Ferrer, Enrique Iglesias, Fernando Henrique Cardoso, Umberto Eco, Anthony Giddens, Mary Robinson, Woody Allen, Simone Veil, Belisario Betancurt, Javier Pérez de Cuéllar, Václav Havel, Mário Soares, Jacques Delors, Nicolás Castellanos, Luis María Anson y Juan Antonio Samaranch.

Nacida en Bogotá (Colombia) en 1961, Ingrid Betancourt inició su carrera política en 1994, cuando se presentó a las legislativas como candidata del gobernante Partido Liberal.

Firme defensora de la libertad y los derechos humanos, durante su trayectoria pública dirigió sus esfuerzos al impulso de la democracia y la justicia social, y a la lucha contra la corrupción, el narcotráfico y la violencia, en la búsqueda de un futuro distinto y más esperanzador para los niños y jóvenes de Colombia.

Abandonó el Partido Liberal en 1998 y se presentó al Senado por el partido Oxígeno Verde.

Dimitió de su cargo para presentarse a las elecciones presidenciales por el movimiento Nueva Colombia en 2002, año en el que fue secuestrada por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) junto a su directora de campaña, Clara Rojas, que fue liberada el 10 de enero de 2008.