Néstor Hernández, concejal de Desarrollo Sostenible del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, anunció que en el plazo de seis meses el Consistorio empezará a aplicar la normativa vigente sobre la limpieza de las vías públicas. Al tiempo, presentaba dos nuevas máquinas de extracción de chicles incrustados en las aceras.
Esta norma de próxima aplicación se recogen sanciones de hasta 200 euros para particulares y empresas que viertan sustancias en los contenedores. Asimismo, se sancionará a aquellos ciudadanos que no hagan uso de las papeleras para depositar un papel o un chicle.
Hernández explicó que el Ayuntamiento tiene “un firme compromiso con la limpieza de esta ciudad” y por ello “se va a invertir más en este capítulo en los próximos doce meses”. De hecho, en el presupuesto de 2008 se recoge un incremento del 19% en la partida de limpieza. Sin embargo, “no vamos a estar invirtiendo en limpieza sin que los ciudadanos se conciencien de que una ciudad europea y moderna como la nuestra debe presentar otra imagen”, declaró el concejal.
Por ello, Néstor Hernández quiso precisar que “hoy avisamos amablemente de que este sistema sancionador entrará en vigor en el segundo semestre de 2008”. No obstante, el edil informó de que los policías locales comenzarán enviando un aviso de la sanción al ciudadano que haya cometido la infracción reiteradas veces.
Las dos máquinas de extracción de chicle presentadas este viernes comenzarán a trabajar en breve en las zonas comerciales, fundamentalmente, al ser “los lugares donde más suciedad de este tipo se ha detectado”, explicó Hernández.
Las dos funcionan a base de agua caliente, a una temperatura de 30 a 150 grados, a presión y sin ningún producto químico adicional. El personal que las utilizará pertenece a la plantilla municipal del servicio de limpieza y para desarrollar esta labor han recibido una formación reglada.