La Guardia Civil ha detenido a los cuatro presuntos autores de un robo cometido el pasado 30 de marzo en una vivienda del Cruce de Arinaga (Gran Canaria), de la que se llevaron 60.000 euros tras forzar la caja fuerte, según ha informado este viernes la Comandancia de Las Palmas
Los autores de ese asalto consiguieron su botín a segundo intento, ya que en una primera tentativa fueron detectados por los vecinos y tuvieron que huir. Sin embargo, regresaron unas horas más tarde y consiguieron hacerse con el contenido de la caja fuerte.
En su fuga, fueron sorprendidos por otro vecino del inmueble, un agente del Cuerpo Nacional de Policía que regresaba a su casa al terminar su servicio, desarmado, y que logró retener con la ayuda de otros inquilinos a uno de los ladrones. Sin embargo, sus cómplices volvieron inmediatamente, amenazaron a los vecinos con una katana y lograron liberarlo.
La Guardia Civil identificó a los cuatro sospechosos de ese robo tras dos meses de investigaciones, que culminaron el jueves con el registro simultáneo de tres viviendas: dos en Las Palmas de Gran Canaria y una en San Fernando de Maspalomas. Los detenidos son tres varones y una mujer naturales de Gran Canaria, a los que se les han requisado varios objetos presuntamente relacionados con el robo, como katanas y una pistola simulada, así como varias cantidades de cocaína, hachís y marihuana y 33.000 euros.
La Comandancia de Las Palmas asegura que la operación sigue abierta y que no se descartan nuevos arrestos “en breve”. Uno de los registros efectuados afectó a una vivienda que, en realidad, pertenecía a unas personas ajenas por completo al delito investigado, pero cuya dirección había sido utilizada de forma fraudulenta por uno de los detenidos.
La Guardia Civil y el juzgado que coordinó el registro, el número 2 de Telde, han informado a su propietario de su derecho a solicitar que se le abonen los daños ocasionados al forzar la puerta.