Antonio Hernández Hernández, el último presidente de la Sociedad Anónima Laboral Canaria de Autobuses Interurbanos (Salcai) falleció este sábado en Las Palmas de Gran Canaria. Fue la mano derecha, actuando como vicepresidente, del primer presidente de la compañía, Domingo Guerra, que se puso al frente de esa empresa de economía social en 1973 después de una crisis convulsa por la crisis de la histórica concesionaria, Aicasa, que dio lugar a dos nuevas concesiones: la del centro-norte, otorgada a Utinsa, bajo la fórmula de sociedad anónima pura, y la del Sur, que correspondió a Salcai, que se constituyó como sociedad anónima laboral.
Antonio Hernández era inspector desde los tiempos de la antecesora del transporte interurbano en Gran Canaria, Aicasa, y fue elegido presidente en 1979. Desempeñó ese cargo, por elección de todos los miembros de la empresa cooperativa, hasta 1997, cuando fue sustituido por Antonio Benítez, responsable de pilotar el proceso de fusión con Utinsa que dio lugar a Global SU. Benítez ha sido el presidente que más años ha estado al frente de la empresa.
Los restos mortales de Antonio Hernández Hernández están siendo velados por sus familiares, por los trabajadores de Global y por todos sus amigos en el tanatorio de Las Torres, en Las Palmas de Gran Canaria.