El Gobierno de Senegal rechazó este lunes que exista un acuerdo financiero con España por la repatriación de las personas emigrantes que intentan llegar a Canarias de forma clandestina.
“No hay ningún tipo de ”deal financiero“ entre Dakar y Madrid en lo que se refiere a la operación de repatriación de los 750 emigrantes clandestinos”, dijo a la prensa el ministro senegalés de Juventud y Empleo, Aliou Sowha.
“No es cuestión de dejar a los ciudadanos senegaleses que vivan en condiciones de total precariedad en el extranjero”, añadió el ministro para justificar la política adoptada acerca del millar de ilegales que han llegado últimamente a Canarias.
Según Sow, ha llegado la hora de poner fin a la emigración clandestina ya que se está llevando a cabo una nueva cooperación en materia de emigración que consiste en promover salidas en condiciones que cumplan con el respeto de la dignidad y los derechos humanos de los emigrantes.
En este sentido, el ministro destacó que decenas de contratos laborales han sido concedidos a jóvenes que se encuentran desde hace meses en España, que viven en este país legalmente y que se benefician de todos los derechos de residentes legales.
La emisora privada Radio Futurs Medias (RFM) cuestionó las condiciones en las que se ha desarrollado la repatriación de los clandestinos y lamentó el carácter “confuso” de los acuerdos firmados en octubre del año pasado entre ambos países con el fin de frenar la emigración clandestina.
La gendarmería senegalesa hace los deberes
La gendarmería senegalesa detuvo el sábado pasado en la región sur de Casamance a 90 personas a punto de embarcar en un buque gambiano con destino a las Islas Canarias, según informó este lunes la prensa local.
Según la Agencia de Prensa Senegalesa (APS), una operación lanzada por la gendarmería local impidió la salida de un buque en el que pretendían viajar un centenar de personas de distintas nacionalidades.
Todas las personas que iban a bordo, así como el capitán de la embarcación, de nacionalidad británica, y otros 9 miembros de la tripulación, todos gambianos, fueron detenidas.
Una alerta de la marina nacional senegalesa frustró el viaje, informó la APS, quien también se hizo eco de la interceptación de otras dos embarcaciones en la localidad sureña de Oussouye y en la isla de Diogue.
En la primera embarcación, interceptada en Oussouye, iban 90 personas que fueron detenidas mientras que en la segunda se encontraban solos los tres traficantes que caminaban hacia el punto de salida donde supuestamente habían quedado con los pasajeros.
El mismo día, un total de 750 emigrantes clandestinos habían sido repatriados de Canarias adonde habían llegado una semana antes en una decena de cayucos, según informó Radio Futurs Medias (RFM).
Según la emisora, varios vuelos especiales procedentes de Canarias aterrizaron en el aeropuerto internacional Leopold Sedar Senghor de Dakar para devolver a los inmigrantes, entre ellos 150 de otras nacionalidades de África occidental.