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Los técnicos esperan abordar el 'Cheshire' este domingo y acercarlo más a la costa canaria

El carguero británico Cheshire tras haber estado casi dos semanas a la deriva.

Canarias Ahora

Las Palmas de Gran Canaria —

Los técnicos de la empresa Resolve Marine, contratados por la compañía propietaria del Cheshire (Bibby Line Limited), que navega desde la semana pasada a la deriva en aguas cercanas a Canarias tras la combustión de su cargamento de nitrato de amonio, esperan abordar el carguero este domingo, ya que aparte de “un hilillo de humo” que sale de la bodega número 1 ha habido “un descenso notable en la temperatura”, según la portavoz de la empresa.

La combustión de la carga, iniciada el 12 de agosto en la bodega 4, ha dejado de arder en las bodegas 1 y 2, al igual que lo hiciera en el resto, estabilizándose con la misma temperatura del buque, aunque en la 4 aún existe un punto de calor, a unos 150 grados centígrados.

Bibby Line Limited, que en un principio esperaba salvar algo de las 40.000 toneladas de fertilizantes que transportaba de Noruega a Tailandia, considera “probable” que no se pueda rescatar nada ni enfriando la carga con agua.

El Red Sea Fox está remolcando al buque, que se encuentra a unas 50 millas al este de Gran Canaria, mientras que el VB Hispania y el Miguel de Cervantes (Salvamento Marítimo) se encuentran cerca del carguero dando soporte. Desde la compañía informan que se está hablando con las autoridades para acercar al granelero a la costa y facilitar las operaciones de enfriamiento.

En dichos remolcadores se encuentran trasladados desde el quinto día de iniciarse la combustión expertos holandeses y gibraltareños, que llevan más de una semana y media esperando sin éxito la oportunidad de trabajar en el MV Cheshire, cuya situación ha hecho imposible su labor hasta ahora.

Para facilitar su trabajo se empezó a remolcar días atrás el carguero, que había quedado a la deriva el lunes 14 de agosto al ser evacuados sus 24 tripulantes y llegó a ser arrastrado hasta una distancia de 120 millas de las costas del archipiélago, acercándolo a Gran Canaria.

El plan de acción consiste en acceder al interior del carguero para analizar la situación de las máquinas y tratar extinguir por completo la combustión en una operación delicada porque el aporte de agua puede inundar y desestabilizar el buque.

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