El musical 'Mamma Mia!' calienta motores en el Auditorio
El equipo técnico que forma el musical Mamma Mia! ya se encuentra en Tenerife preparando todos los detalles de este espectáculo, que se estrena este martes en el Auditorio de Tenerife Adán Martín, en Santa Cruz, y donde permanecerá hasta el próximo 2 de enero. El espectáculo, que lleva girando por España varios años, repite en Canarias con un elenco formado por Nina, Eva Diago, Olga Hueso, Nando González y Albert Muntayola como actores principales.
El regidor del musical, Juan Carlos Fernández, ha explicado a los medios de comunicación los entresijos del show, durante una breve visita al backstage del Auditorio, donde numerosos técnicos ultimaban la colocación de los focos, el montaje del escenario, probaban micrófonos o comprobaban el vestuario. Este musical, que se ha estrenado en 440 ciudades de todo el mundo, ha sido visto ya por más de 60 millones de personas, y repite visita a Canarias desde su estreno en España en 2004.
Fernández ha destacado el enorme esfuerzo y trabajo que se realiza detrás del escenario durante cada función, pero también antes y después. Hay poco espacio y mucho movimiento para hacer cambios de escenografía, vestuario o luces. “Tenemos que estar perfectamente coordinados para que todo salga bien”, ha subrayado.
“Normalmente no adaptamos el show al teatro, sino al revés. Intentamos que el escenario se adapte a lo que vamos a hacer en él”, ha dicho mientras enseñaba a los medios el lugar desde el que él controla el espectáculo. “Este es mi puesto de control, el calling, desde el que veo por una cámara que todos los cambios de escena, luces y sonido salen bien”, ha explicado.
“Para que Mamma Mia! salga adelante en cada actuación hacen falta 80 personas: actores y actrices, swings, músicos, maquinistas, equipo de sastrería, de peluquería, producción, regidores, iluminación, sonidistas, gerencia..., y la mayoría estamos detrás del escenario”. Por eso, recalca, “a veces hay más coreografía detrás que sobre el escenario”.
Cada actuación cuenta con más de 75 focos móviles, 30 micrófonos inalámbricos, casi 2.000 metros de cable, más de 300 trajes distintos para los actores y unos 250 pares de zapatos. Precisamente sobre el vestuario, Rodríguez ha desvelado algunas curiosidades. Por ejemplo, que el traje que lleva Nina, la actriz principal del elenco, cuando canta con las Dynamos (el grupo musical al que pertenece su personaje en la obra) lleva incrustados cristales de Swarovski, lo que le da un peso total de siete kilos y un valor de más de 6.000 euros. El vestido, ha explicado Rodríguez, “es como una segunda piel, porque es muy ceñido”, por lo que la actriz, Nina, necesita la ayuda de dos personas del equipo de sastrería para ponérselo.
“Hay cambios de ropa con este vestido que duran solo 30 segundos, así que la coordinación debe ser total”, ha añadido. Tras cada función, el traje es lavado y planchado a mano, “y a veces reparado, porque cantan y bailan con él puesto y se deteriora”. Cada actor se cambia unas cinco veces de ropa por función, menos las protagonistas, que lo hacen unas nueve veces.
El ritmo del musical es “vertiginoso”, lo que implica un ir y venir de profesionales detrás del escenario para que todo lo que ocurra esté perfectamente medido y controlado. Fernández, que lleva al frente del espectáculo más de 1.500 funciones, ha comentado que en los años que lleva como regidor de Mamma Mia! ha visto “de todo” en las representaciones, como cuando una de las actrices sufrió un esguince de tobillo y tuvo que salir a gatas del escenario, o cuando un bailarín sufrió un desmayo y tuvo que ser sustituido en cuestión de segundos. “Por suerte tenemos un equipo de actores y actrices, además de los principales, que están ahí para cuando pasan estas cosas. Son los swings”, ha explicado. “De todas formas”, ha añadido, “siempre puede pasar algo, por muy controlado que esté todo”.
“La primera vez que vinimos con este musical a Tenerife fue en 2009, y nos llevamos un muy buen recuerdo del público de aquí, así que esperamos repetir la experiencia de entonces”, ha concluido.