Las áreas de Vivienda y Bienestar Social del Ayuntamiento de La Laguna y la empresa pública Muvisa trabajarán de forma coordinada para atender la falta de vivienda social en el municipio, pues calculan que hay al menos 2.300 familias pendientes de una vivienda, aunque estiman que posiblemente sean cerca de 6.000.
La concejal de Vivienda, Elvira Jorge, y el concejal de Bienestar Social, Rubens Ascanio, han mantenido ya un primer encuentro de trabajo con el gerente de Muvisa, Carlos Díaz, y el consejero delegado, Juan Ignacio Viciana, con el objetivo de coordinar acciones conjuntas para hacer frente al problema de la falta de vivienda social.
“En estos momentos tenemos un déficit de miles de viviendas sociales en régimen de alquiler, fruto de más de una década de inacción en esta importante materia”, asegura Rubens Ascanio, que coordinó el encuentro. “Además afrontamos con gran preocupación más de una veintena de desahucios inminentes, tanto de personas en régimen de alquiler como propietarias, así como familias en situación de ocupación”, añadió.
El edil de Bienestar Social considera que los proyectos previstos para dotar de viviendas para urgencias habitacionales “no han surtido efecto, pues apenas lograron, gracias a la presión de la oposición, ocho viviendas vinculadas al Ayuntamiento para alquileres sociales en el pasado mandato y ahora hay que partir desde cero”. Además, el concejal cree que hasta ahora “ha existido poca respuesta real en este tiempo tanto de entidades como Visocan, como de los grandes tenedores de vivienda vacía, las entidades bancarias”.
Desde la Concejalía de Bienestar se está ya trabajando en ampliar los convenios existentes con Muvisa para la búsqueda de viviendas privadas en régimen de alquiler, “que sirvan para paliar la necesidad inmediata que tenemos”, comentó Ascanio.
Por su parte, Elvira Jorge indicó que esta materia “debe ser un tema central de la acción municipal, ya que es una de las grandes problemáticas que tenemos”. Añadió que su área “pondrá en marcha las acciones necesarias para que en este mandato haya oferta real de vivienda en régimen de alquiler en el municipio”. Además, señaló que La Laguna “debe afrontar una situación en la que hay miles de familias pendientes de una vivienda, al menos 2.300, aunque posiblemente sean cerca de 6.000, mientras los precios de alquiler o compra son absolutamente prohibitivos”.
La concejal cree que una acción a la que el alcalde y el conjunto del Gobierno está mostrando una “gran preocupación” es la de la dificultad para el acceso a una vivienda. “Debemos mirar a otras latitudes donde ya se está enfrentado en serio la problemática del incremento del precio del alquiler. Vamos a afrontar colectivamente la búsqueda de salidas que ”esperamos que sean visibles en el menor tiempo posible“, dijo.
La responsable de Vivienda comentó que una de las vías que están estudiando es la compra de promociones urbanísticas inacabadas para convertirlas en viviendas de uso social, para lo que van a necesitar una “sensibilidad” de los promotores para poder cubrir las necesidades de cientos de familias que están en riesgo por vivir al borde de desahucio o en infraviviendas.