El brote en la residencia Santa Rita amenaza la mejoría esperada en Tenerife con el toque de queda

La residencia Hogar Santa Rita, en el Puerto de la Cruz, Tenerife, no encuentra respiro. El brote que se detectó en el centro sociosanitario a finales de noviembre asciende a 180 contagios, 164 entre residentes y 16 de trabajadores. La Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias ha informado de que ha intervenido en el centro de mayores y que se ha trasladado al Hospital Universitario de Canarias un total de 24 pacientes por tener patologías previas.

Esta situación surge en un momento en el que la isla occidental no tiene sus mejores datos epidemiológicos, registrando este martes 108 de los 141 nuevos positivos en Canarias, posicionándola como la isla más afectada por la pandemia actualmente.

Lluis Serra, portavoz del comité científico que asesora al Gobierno de Canarias en la crisis sanitaria, insiste en mostrarse positivo con respecto a la situación que está viviendo Tenerife, que ha obligado al Gobierno regional a tomar medidas sanitarias excepcionales en la isla de cara a la Navidad, como limitar la circulación nocturna de las 23:00 a las 06:00 horas. El portavoz pone el foco en el brote de la residencia sociosanitaria y advierte de que, actualmente, es lo “más preocupante” en relación a la COVID-19 en Tenerife, por lo que indica que ahora “lo principal” es que se controle. Además, al no saber cómo ha podido entrar el virus en el centro, Serra asegura que se deberá llevar a cabo una “investigación exhaustiva” para conocer su raíz.

En este momento, los residentes de Hogar Santa Rita no pueden recibir visitas y para Navidad “ya se ha establecido un protocolo de PCR en función de cómo se desarrolle el brote”.

En relación con la situación epidemiológica del resto de Tenerife, el experto es optimista e indica que “con las medidas que se han tomado desde el pasado noviembre es imposible que no bajen los contagios en los próximos días”. Al ser preguntado por las medidas que se tomarían en el caso de un posible empeoramiento de la situación en la isla, Serra afirma que se puede “manejar cualquier medida”, desde la ampliación del horario del toque de queda hasta los confinamientos perimetrales. Sin embargo, “saber lo que sucederá o las medidas que se tomarán es imposible”, reconoce.

A pesar de que Tenerife registró el pasado mes de noviembre el peor dato de nuevos contagios desde el comienzo de la pandemia, Serra insiste en que las medidas van a surtir efecto y que “dentro de una semana podremos empezar a respirar”.