El Juzgado de Instrucción número 4 de Santa Cruz de Tenerife ha recuperado los teléfonos móviles que el policía que inició la investigación del caso Mediador (y que posteriormente fue apartado) denunció que habían desaparecido de una caja fuerte de su despacho. Según el diario ABC, que cita fuentes policiales, los teléfonos de Antonio Navarro Tacoronte, alias El mediador, estaban siendo custodiados en comisaría por el Grupo de Delitos Tecnológicos de la Brigada de Policía Judicial de Tenerife, y tras la denuncia del policía, Francisco Moar, la magistrada Ángeles Lorenzo-Cáceres pidió que le fueran entregados, cosa que ocurrió el pasado martes.
Según confirmaron a Canarias Ahora fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC), el inspector jefe Francisco Moar presentó una denuncia alegando dos cuestiones: por un lado, injurias y calumnias contra agentes que le habían denunciado en el ámbito administrativo por presunto acoso laboral, y, por otro, la supuesta sustracción de teléfonos móviles de la caja fuerte de su despacho. Se trata de los teléfonos del mediador, Antonio Navarro Tacoronte.
Moar fue apartado del caso Mediador por el comisario provincial, Luis Felipe San Martín, quien a su vez está suspendido al estar siendo investigado en un caso de violencia de género. Esa investigación se inició tras una denuncia presentada precisamente por el jefe de la Brigada Provincial de la Policía Judicial de la Policía Nacional, Francisco Moar, quien supuestamente tuvo conocimiento de los hechos en el ejercicio de sus funciones, y quien trasladó a los investigadores de la Unidad de Atención a la Familia y la Mujer (UFAM) una memoria USB que contiene un vídeo que ha sido difundido por algunos medios, en el que se ve el arma y se escuchan frases de la mujer cuando decía “deja por favor, deja la pistola”.
Moar también ha presentado una queja en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) contra la jueza instructora del caso, María de los Ángeles Lorenzo-Cáceres Farizo. Según han confirmado desde el órgano de los jueces a este periódico, que no ha entrado en el contenido de la misma, esa queja se encuentra en fase muy inicial.
Según explican desde el Consejo General del Poder Judicial, cuando llega una denuncia contra los jueces se abren diligencias informativas, una fase preliminar para determinar si hay materia disciplinaria pero sin entrar a juzgar.
En estos momentos aún no se ha decidido si se archiva esa queja o si incoa un expediente disciplinario que de lugar a una investigación en la que se llamen a declarar a las partes. Por tanto, insisten en que la queja se encuentra en una fase muy inicial. El expediente puede terminar en archivo o con una propuesta de sanción.
Cabe recordar que en el caso Mediador se investiga una presunta trama de sobornos que motivó en su momento la detención del exdiputado Juan Bernardo Fuentes Curbelo, su sobrino el exalto cargo del Gobierno canario Taishet Fuentes y el general jubilado de la Guardia Civil Francisco Javier Espinosa Navas.