Los servicios no sanitarios del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla de Santander están en manos de un fondo de inversión de capital riesgo que se hizo con la mayoría accionarial de Ferrovial Servicios, que junto a la constructora SIEC, configuraban las sociedades integrantes de Smart Hospital Cantabria. Esta compañía sigue existiendo y gestionando los servicios privatizados por el contrato público-privado con el que se reconstruyó el centro sanitario tras acumular años de retraso, pero ahora, en Smart Hospital está Serveo, -la marca tras la compra por Portobello Capital de tres cuartas partes de Ferrovial Servicios-, y la propia SIEC.
Smart Hospital Cantabria gestiona todo aquello que no tiene que relación directa con la salud del paciente, pero que es imprescindible para que un hospital funcione: limpieza, seguridad, vigilancia, gestión de residuos, mantenimiento, restauración, agua, gestión energética, almacenes, viales y jardines, equipos de electromedicina, impresión y reprografía o informática, por ejemplo.
En 2022 se confirmó la venta por Ferrovial del 75% de Ferrovial Servicios a la firma de capital riesgo Portobello, que dispone ahora del control tanto de Serveo como de Smart Hospital. “En este contexto, Smart Hospital Cantabria (SHC), sociedad responsable de las obras del Hospital Marqués de Valdecilla y de más de doce servicios no asistenciales y varias explotaciones comerciales en el centro sanitario, contará ahora con Serveo y SIEC como empresas integrantes”, explican en su página web, con cerca de 650 personas trabajando en diversos servicios.
Serveo, con cerca de 30 años de experiencia, ofrece servicios, especialmente, en salud, industria, energía y la gestión de inmuebles y servicios, como es el caso de Valdecilla. Con más de 25.000 empleados, tiene presencia estable en toda España, gestionando el mantenimiento de más de 4,5 millones de metros cuadrados de infraestructuras públicas y privadas y 300.000 activos en el sector industrial, la operación de ocho torres de control de tráfico aéreo y la conservación de más de 4.000 kilómetros de carreteras. Tiene presencia en más de 140 hospitales españoles.
A su vez, Portobello Capital, fundada en 2010, es una de las principales gestoras independientes de capital riesgo con sede en España y con operaciones en todo el sur de Europa. Portobello cuenta con más de 2.100 millones de euros de activos gestionados, seis fondos activos actualmente, 21 compañías en su porfolio y más de 60 inversiones realizadas a lo largo de sus 20 años de trayectoria.
Según las fuentes consultadas, el cambio de Ferrovial por Serveo no ha incidido especialmente en el día a día de la relación con instituciones y trabajadores: los mismos jefes y las mismas plantillas. El cambio sustancial, según los sindicatos, fue cuando entró en juego el contrato público-privado, es decir, la irrupción de la empresa privada, en aquel entonces Ferrovial, en 2015.
Conflictividad
La gestión de los servicios no sanitarios supone también la de los recursos humanos que dependen de Smart Hospital, cuya plantilla está conformada por 650 trabajadores. Actualmente, los 400 trabajadores de la limpieza hospitalaria están movilizados por el incumplimiento de los turnos y la sobrecarga de trabajo derivada de la falta de sustituciones. Los sindicatos han denunciado, a este respecto, la “degradación” de las condiciones de la plantilla de limpieza de Valdecilla que depende de Serveo.
CCOO, CSIF y SCAS han denunciado esta misma semana que existe “excesiva sobrecarga de trabajo” porque la empresa no realiza las sustituciones en los días de licencias retribuidas, no cubre vacaciones ni incapacidades temporales, ni licencias sindicales, y tampoco cumple con la ratio de personal establecido para las plantas y servicios del Hospital Valdecilla. “No hay tiempo material para realizar la limpieza conforme a lo dispuesto en los protocolos del pliego de condiciones del contrato de adjudicación público-privado como consecuencia de la carga de trabajo. Con un empleado se vienen cubriendo dos o tres puestos a la vez; en consecuencia, la calidad de la limpieza ni es la correcta que se ha contratado, ni la más óptima”, han lamentado.
Según insisten desde la plantilla, “la organización del trabajo y las condiciones laborales cada día son peores”. Además, han criticado que los responsables, en lugar de negociar, “enturbian el ambiente brindando a los trabajadores un trato denigrante, con gritos y malas formas, faltas de respeto y consideración”. La crítica fue suscrita en los últimos días por el PRC, que considera que las condiciones del personal de limpieza “dejan mucho que desear”.
Smart Hospital Cantabria fue creada para la conclusión de las obras del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla de Santander y la gestión integral de algunos de los servicios sanitarios privatizados durante la etapa de Gobierno del Partido Popular (2011-2015), con la actual presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga (PP), como consejera de Sanidad y Servicios Sociales. Esta compañía asumió durante 20 años y con precio superior a los 900 millones de euros la prestación de una docena de servicios no clínicos y cuatro explotaciones comerciales.
Crítica política
El exconsejero de Sanidad, Raúl Pesquera (PSOE), ha incidido en las servidumbres que el gestor privado establece para hacer cambios en el hospital, al tiempo que ha recordado que Serveo y Siec tienen pendiente la ejecución de un fallo condenatorio sobre el transporte interno dentro del hospital, con 30 personas que tienen que ser asumidas por la empresa adjudicataria. “En el Hospital de Valdecilla tenemos una hipoteca a 20 años y para tirar un tabique tienes que pedir permiso a Ferrovial”, ha declarado en una entrevista a este medio.
Paula Fernández, diputada autonómica del PRC, también ha pedido al Gobierno de Cantabria menos permisividad con la adjudicataria de los servicios no sanitarios. “Los trabajadores carecen de medios apropiados para desarrollar su labor e incluso carecen de baños aptos y vestuarios donde cambiarse”, ha dicho Fernández sobre los trabajadores de la limpieza. La regionalista ha censurado la implantación en el hospital de un nuevo sistema de gestión de residuos “sin contar con los protocolos e informes previstos, lo que se está traduciendo en una lamentable falta de higiene”. “Nos tememos que se está actuando con excesiva permisividad en la relación con la empresa adjudicataria, a la que es preciso exigir el cumplimiento estricto de las condiciones para garantizar un adecuado funcionamiento del servicio”, ha concluido.