ENTREVISTA Giuliano Camilleri, artesano del papel, librero, editor y gestor cultural

“Un libro es un objeto que nos acompaña y siempre nos dice algo nuevo, nos cambia y nos hace mejores personas”

Giuliano Camilleri (Catania, Sicilia, 1979) tiene muchos oficios, pero todos ellos giran en torno a tres elementos: el papel, la tinta y la aleación tipográfica. Camilleri, licenciado en Filología Bizantina, es restaurador de libros y documentos, editor, librero y docente. Pertenece a la cuarta generación de Camilleri que se dedica a las artes gráficas. Su mundo gira en torno al libro en el sentido más completo de la palabra, desde la mañana a la noche, en todos los ámbitos y lugares. De cómo este italiano polivalente acabó en Cantabria tiene la culpa su esposa, Alicia Oceja, compañera también en las labores librescas y oriunda de Santillana del Mar, a donde atrajo al catanés hace ya unos años para hacer familia y libros. Para quienes quieran conocerlos en persona, a finales de este mes esta pareja tiene otra cita con el público amante de los libros en una nueva edición del Festival Arte Libro, que tendrá lugar del 30 de abril al 1 de mayo, en la Plaza Mayor de la localidad cántabra.

¿Cómo es que un siciliano acaba residiendo y trabajando en Cantabria?

La mía es una historia de amor y papel. Hace veinte años encontré a Alicia [Oceja López, su esposa], mientras ella hacía su Erasmus en Catania, mi ciudad natal, y desde entonces nuestra historia ha ido creciendo a la vez que nuestro amor-pasión por los libros, los papeles, y todo un mundo que gira entorno al libro-objeto.

Editor, restaurador, conservador, encuadernador, docente, comisario de exposiciones, librero... ¿con qué se queda de todo ello?

Me quedo con todo, mi trabajo es el libro como objeto, es lo que vale y lo que importa. En mi trabajo no hago distinciones. Es verdad que tengo que ponerme un traje distinto en cada ocasión, pero el 'objeto' siempre es el mismo: el libro y su mundo.

El libro como objeto, ¿qué nos dice sensorialmente?

Un libro es un objeto complejo, hecho de algo tan material como el papel, la tinta, los cartones, y de algo tan inmaterial como su contenido. Este conjunto es un 'unicum' que estimula nuestros sentidos, el tacto, la vista y, si me apuras, también el olfato. Los libros huelen, el papel nos puede producir un placer 'erótico' al tocarlo, y los leemos con los ojos y con nuestra mente y nuestro corazón. ¿Puede existir algo más complejo y completo al mismo tiempo? Un libro es este objeto que nos acompaña a lo largo de nuestra vida y siempre nos dice algo nuevo, que nos cambia y nos hace mejores personas.

¿Cuál ha sido el papel histórico de Italia en el mundo del libro y de la imprenta?

Italia tiene una enorme tradición en la evolución de la historia de la cultura del libro manuscrito, con sus monasterios y scriptorium. Solo hay que pensar en la enorme influencia que tuvieron los monasterios benedictinos y franciscanos italianos en la difusión y salvaguardia de la cultura clásica, durante los momentos más oscuros de ciertas épocas de nuestra historia común. Un ejemplo ficticio, pero bien documentado, lo encontramos en 'El Nombre de la Rosa', de Umberto Eco. Luego, desde la aparición de la imprenta, de la difusión del libro impreso, impresores como Aldo Manucio, Bodoni, y luego diseñadores como Aldo Novarese, Attilio Rossi, Bruno Munari y muchos más, han contribuido a nivel mundial a la evolución del libro como objeto.

¿Por qué este fenómeno se dio en Italia y no en otro país?

En Italia la tradición de la palabra escrita y de la palabra impresa se funden a lo largo de la historia. Los grandes impresores venecianos entre 1500 y 1700 habían creado una verdadera industria del libro, donde se trabajaba todo el proceso de producción del libro, desde el diseño de los tipos, hasta la comercialización de este producto que en determinadas épocas fue uno de los principales productos de exportación de la República de Venecia. En los años 30 el futurismo primero y el racionalismo en tipografía revolucionaron el concepto de libro, y crearon las bases para los libros de 'artista' y para la gráfica moderna... Luego, a partir de los 40 y hasta los 90, el genio de Bruno Munari revolucionará la idea misma del libro como producto industrial, creando libros objetos para el gran público... Y así, a seguir... 

¿Cuál es su familia tipográfica preferida?

Depende del día, pero me quedo con Bodoni y Futura.

¿Hasta qué punto un tipo tiene personalidad? Me refiero al tipográfico...

Un tipo siempre tiene personalidad, es decir, nace con ella, es su propio 'imprinting'. Lo hace único y reconocible. Pensar en el Bodoni para ciertas ediciones de arte, o el Gill Sans deletro de Londres... O en Helvética y Futura que son las tipografías elegidas para los más famosos 'branding' del siglo pasado. Todos tienen carácter propio. 

¿Con serifa o sin ella?

De día sin ella y, de noche, con ella [ríe].

En tiempos de la cultura audiovisual y digital como son los actuales, ¿cómo se puede mantener una empresa dedicada al papel y al papel artesanal?

Nos mantenemos porque sabemos diferenciar nuestras actividades y porque, igual me repito, concebimos nuestro trabajo como algo que vá más allá de la simple venta de productos. Así que en este mundo tan global, hemos intentado crear un nicho de mercado que cada vez se hace un poco más grande.

¿Ha notado un mayor interés por el papel tras la pandemia?

La situación es la misma... Salvo que ahora el papel como materia prima se ha puesto por las nubes. Se sigue imprimiendo igual que antes, la gente demanda libros, busca papeles para manualidades, dos sectores que se han visto reforzados con la pandemia. Pero ahora producir es mucho más caro.

¿Qué papel juegan los talleres en su mundo?

No sé con qué me quedo: tenemos un público muy variado, pero está claro que los cursos y los talleres son algo que llama mucho la atención del público, que se acerca al mundo del libro con ganas de aprender 'cómo se hace un libro'. Este punto de partida es fundamental para luego completar con la venta de materiales. Hay que crear un público interesado en el sector y luego ir proponiendo siempre cosas nuevas. Así se puede ir ampliando el mercado.

¿De dónde procede su vinculación con Santillana del Mar?

El Festival Arte Libro nace en Santillana del Mar en 2010 de una idea mía y de Alicia, que es de la localidad y ama su pueblo y su historia tan vinculada con el mundo de los libros. Ocurrió en 2010 gracias al apoyo que en su día nos brindó Mar González García, por aquel entonces concejala de Turismo. Gracias a ella nuestro proyecto se pudo materializar y consolidar en el tiempo. Hoy el festival es una marca distintiva de Santillana del Mar y de su apuesta por la cultura. Y en las últimas ediciones gracias al apoyo absoluto de Pilar Alcorta Cayón, concejala de Turismo y Cultura, nuestro festival se ha visto reforzado y ampliado con la incorporación del Certamen de Microrrelatos que este año llega a su tercera edición. 

A finales de mes vuelve a celebrarse en Santillana del Mar el Festival Arte Libro. ¿En qué consiste y cuáles son las novedades de este año?

Un año más, Santillana acogerá del 30 de abril al 1 de mayo el Festival Arte Libro. Que para mí y para Alicia es nuestro tercer hijo, después de Marta y Giovanni. Es un evento en donde intentamos que cada año sea siempre nuevo e interesante. Este año el lema es 'Libros en Movimiento', entendiendo que los libros son algo que se mueve, y nos hace mover, en el tiempo y el espacio. Pero al mismo tiempo también desde el punto de vista físico los libros 'Pop Up' están pensados para leerse 'moviéndose'. En esta edición tendremos una gran variedad de talleres dedicados a la encuadernación de libros 'Pop Up', a cargo de la pequeña editorial argentina Membrilla; un interesante taller de tipopoemas con máquina de escribir, a cargo de la Asociación litoral; además de los talleres de 'scrapbooking', a cargo de Bricolor, de Ponferrada. También tenemos talleres dedicados a Munari, 'I Pre Libri' y el taller de estampación no convencional 'Rose nell'Insalata'. 

Procedentes de la tradición, ¿dejan también espacio a lo nuevo?

En la tarde del sábado, contaremos con una interesante performance que bajo el título de 'Imprografía' una interesante apuesta de Alfredo Santos Llama. El objetivo de la 'imprografía' es promover la experimentación e interacción entre lo visual y otros entornos artísticos, como por ejemplo el sonoro, articulando nuevos modos de diálogo en distintos formatos. Con ello se intenta proponer formas alternativas de entender tanto el proceso creativo como su recepción por parte del público presente. En base a la improvisación libre y su ejecución en directo, el dibujo, en su concepción más amplia, se despliega a través de las posibilidades gráficas de la composición, el trazo y la gestualidad con especial atención a lo temporal en su desarrollo. Para esta ocasión se realizará un diálogo, mediante una serie de signos gráficos a modo de código entre los músicos y el artista plástico, que propondrá una composición visual en continuo cambio. De esta forma, se genera una conversación entre los sonidos y la disposición de elementos visuales de modo que cada momento sea único e irrepetible.

Tengo entendido que habrá en el festival una referencia a Ucrania.

La gran novedad de este año será un espacio dedicado a un colectivo de ilustradores ucranianos con los que estamos colaborando para 'ver la guerra' con los ojos de artistas y diseñadores. Se trata de una exposición de nueve ilustradores que, a través de la cartelería y el póster, nos meten dentro este evento que está cambiando nuestras vidas. Ediciones Arte libro ha sacado una carpeta de artista con estas ilustraciones, que se venderá para ayudar a los ilustradores que se encuentran desplazados por toda Europa. Contaremos el domingo con la ilustradora Polina Dorochenko que realizará un taller abierto a todos los niños y niñas sobre su último libro ilustrado, publicado poco antes del comienzo de la guerra. 

¿Qué es Café Arte Libro?

Contaremos como todos los años con nuestra pequeña Feria Café Arte Libro, donde nos acompañarán, entre otras, las editoriales de Cantabria, El Desvelo, Fanes, Librucos, Los Cántabros, Ediciones Arte Libro y Septentrión. Libreros Asociados de Cantabria contará con una carpa donde todas las librerías asociadas de Cantabria expondrán una selección de títulos de libros ilustrados e infantiles. Nos acompañarán además las pequeñas editoriales de otras comunidades: Membrilla, desde Argentina; Tralarí, desde Valladolid; Mariposa, desde León; y las ilustradoras cántabras Eva Elcano y Lucia Moure, así como la encuadernadora madrileña Mar de Ruiz de Pascual.

Tengo entendido que ha viajado regularmente a las ferias internacionales de papel para adquirir material. ¿Se siente apoyado en este sentido por las instituciones?

Durante ocho años, hasta el 2020, hemos viajado regularmente a las principales ferias de papelería de Italia y Alemania para comercializar nuestros papeles decorados de la marca Artpapel. Participando en eventos tan importantes como HOMI, en Milán, feria del diseño, o el Paperworld del Messe Frankfurt. Ha sido toda una aventura que hemos costeado como buenos empresarios con nuestros fondos.

Actualmente realiza una gira por Cantabria exponiendo su trabajo, ¿en qué consiste?

Dentro de las actividades del XIII Festival Arte Libro de Santillana del Mar, la Asociación Arte Libro y su biblioteca proponen un viaje a través de las ediciones 'Pop Up' y de libros desplegables, que se conservan en su biblioteca. La exposición itinerante ha sido posible gracias a la Consejería de Cultura del Gobierno de Cantabria. Una exposición que nos mostrará toda la belleza de estas pequeñas grandes obras de arte y de ingeniería de papel. Organizada de manera cronológica y didáctica, se mostrarán desde los primeros libros con desplegables del siglo XVIII, pasando por ediciones de los años 30, 40 y 60 hasta algunas piezas únicas como 'The Index Book' de Andy Warhol, o las ediciones limitadas de Robert Sabuda. Empezaremos en marzo en la Biblioteca de Astillero, para seguir en abril en la Biblioteca Central de Cantabria y en la biblioteca de Comillas y de Santillana del Mar. Seguirán las bibliotecas de Bezana, Potes, Mazcuerras, Camargo, Santa María de Cayón, Cabezón de la Sal, Reinosa y Santoña hasta diciembre de 2022.