José María Mazón, el hombre de confianza de Revilla cuyo último tren en política le llevó hasta el Congreso

La dilatada trayectoria política de José María Mazón (Oviedo, 1951) le ha deparado un último e inesperado papel que con el paso de los meses ha ido ganando protagonismo. La apuesta de Miguel Ángel Revilla para encabezar la candidatura con la que ha conseguido hacer un hueco a su partido en Madrid fue su hombre de confianza y durante tres legislaturas ha sido consejero de Obras Públicas y Vivienda en Cantabria.

Pero cuando el secretario general del PRC decidió presentar a su formación a las elecciones generales de abril, Mazón era un desconocido en el panorama político nacional, siendo 'el diputado del PRC de Revilla' la manera más habitual que utilizaban los medios madrileños para referirse a él. Así todo, este ingeniero de Caminos, Canales y Puertos, que se ha convertido en la voz del presidente cántabro en el Congreso, ha ido poco a poco haciéndose notar, hasta el punto de que su nombre y apellidos ya no van inexorablemente asociados al de su líder.

No obstante, sus intervenciones públicas siguen de forma escrupulosa el camino marcado por Revilla, tanto cuando el PRC fue el único partido que apoyó a Sánchez en la investidura de abril como cuando en esta última ha decidido votar 'no' tras conocer el acuerdo del PSOE con ERC. Y es que cuando Mazón improvisa, a veces patina.

Solo hace falta remitirse a los antecedentes, cuando en una ocasión defendió que “es necesario reducir el gasto en todos los ámbitos, incluida la Educación, la Sanidad o los Servicios Sociales, para conseguir recursos que permitan financiar la obra pública”. En plena campaña electoral de 2011, momento en el que la crisis golpeaba muy fuerte a los sectores más vulnerables de la sociedad, al entonces responsable de Obras Públicas de Cantabria se le ocurrió la idea en un debate entre candidatos de plantear la posibilidad de recortar en las materias más sociales del Estado de Bienestar.

Pero ahí no quedan sus deslices. También como consejero de Vivienda calificó de “bichos” en 2016 a los inquilinos de las viviendas que iba a poner en alquiler el Gobierno cedidas por la Sareb (el banco malo). Se trata de una denominación tan peyorativa como desafortunada -empleada por bancos e inmobiliarias para referirse a morosos- en un contexto en el que miles de personas estaban siendo desahuciadas en España y centenares en Cantabria como consecuencia de la crisis. En ambas ocasiones fue desautorizado por su partido y tuvo que rectificar, pidiendo disculpas públicamente.

Ahora, Mazón ya es la cara visible del PRC en Madrid, y lo seguirá siendo al menos durante esta legislatura, pero con la senda bien delimitada por Revilla, cuyo partido es y ha sido desde sus orígenes capaz de pactar a derecha e izquierda, con PP y PSOE, para gobernar Cantabria. Un Ejecutivo de coalición con los socialistas que ahora, precisamente con su negativa a apoyar la investidura de Pedro Sánchez, está en cuestión y puede finiquitarse tan solo seis meses después de haber sido reeditado.