El PP justifica el aval de casi un millón de euros del Gobierno de Cantabria a un proyecto cinematográfico frustrado
La millonaria aportación pública por parte del Gobierno de Cantabria a 'Cuervos' -una película grabada en el municipio de Medio Cudeyo durante el pasado año y que no ha llegado a estrenarse- a través del Instituto Cántabro de Finanzas (ICAF) llegará a los tribunales. El nuevo Ejecutivo autonómico ha decidido emprender acciones judiciales para exigir que los productores respondan ante el quebranto económico sufrido por el organismo público, una medida que “apoyan” desde el Partido Popular, responsables de la concesión de la ayuda, que defienden que la operación “cumplía todas las garantías”.
A preguntas de eldiario.es sobre la controvertida financiación de este filme a cargo de las arcas públicas, miembros de la Consejería de Economía, Hacienda y Empleo durante la pasada legislatura aseguran que “es lógico y normal” que el departamento que ahora dirige Juan José Sota (PSOE) reclame las cantidades adeudadas por la productora. “El ICAF concedió un aval que estaba ligado a las ayudas del Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA) y que incluye la responsabilidad patrimonial de los productores”, recuerdan fuentes populares.
Según señalan desde el PP, es precisamente la retirada de las ayudas del ICAA, que dirigía en aquel momento la cántabra Susana de la Sierra, lo que provoca que los productores de 'Cuervos' dejen de hacer frente a los pagos pendientes. “Hasta ese momento, estaban devolviendo todo lo estipulado”, recalcan. Y es que la subvención de este organismo exigía que el estreno se produjera durante el año pasado, un compromiso que no fueron capaces de cumplir.
A las críticas del actual Gobierno de Cantabria por esta operación fracasada se han unido en las últimas horas las de numerosos creadores de la comunidad autónoma, que comparan el apoyo a este proyecto con las reiteradas negativas recibidas por ellos y los recortes presupuestarios en Cultura realizados por el Ejecutivo liderado por Ignacio Diego durante los últimos cuatro años.
También distintos participantes del equipo técnico que rodó 'Cuervos' han manifestado su malestar por las acusaciones sobre la falta de calidad técnica de la cinta, además de reiterar que trabajaron con “presupuesto low cost”. Alguno de ellos, como el actor Fernando Ramallo, ha explicado a eldiario.es que ni siquiera cobró todas las sesiones que realizó durante la grabación y que los salarios “estuvieron por debajo de lo estipulado en el convenio”. En su caso, incluso, asegura que llegó a comprar parte del vestuario con el que interpretó el papel protagonista.
Además, el cineasta cántabro Alberto Lavín ha desvelado que pudo ser el director de 'Cuervos' si llega a aceptar las condiciones impuestas por los productores, después de recibir una propuesta para elaborar un guión propio o aceptar el escrito por Raúl Romera de lo que, en un primer momento, iba a llamarse 'El hombre colgado' e iba rodarse bajo las órdenes del veterano Gonzalo Suárez.
“Un desastre de rodaje”
Y es que el ICAF avaló con dinero público la producción de 'Cuervos', una cinta que iba a ser el segundo largometraje del director sevillano Raúl Romera y que está protagonizada por los actores Fernando Ramallo, Marta Serrano y Asunción Balaguer. La inversión se realizó a través de un acuerdo con la productora North Cinema Entertainment y con la condición de que la película se rodara íntegramente en Cantabria.
Este thriller “oscuro y claustrofóbico”, como lo definen sus productores, tuvo como escenario principal la Finca Museo del Marqués de Valdecilla, en el municipio cántabro de Medio Cudeyo, dirigido por la alcaldesa 'popular' María Antonia Cortabitarte. El rodaje se celebró durante 21 días en el mes de marzo de 2014 y tuvo otras reconocidas localizaciones dentro de la comunidad autónoma, como el Parque Natural de las Dunas de Liencres o la playa de La Arnía.
Pese al apoyo económico de las administraciones públicas, el rodaje se realizó con las prisas propias del que cuenta con un presupuesto ajustado y el casi medio centenar de personas que formaron el equipo técnico de la película tuvieron que superar distintos sobresaltos, como las condiciones meteorológicas, que complicaron la grabación durante las tres semanas en las que estuvieron en Cantabria, algo que influyó también en el resultado final de la cinta.
Según señalaron a este periódico desde la Consejería de Economía, la grabación fue “un desastre”, por lo que descartan que el proyecto llegue a exhibirse ante los espectadores. En este sentido, apuntan a problemas de iluminación, entre otras cosas, que han convertido el resultado final en un producto “muy lejano a la promoción turística que se pretendía realizar”.