La compensación millonaria a Ascan compromete el funcionamiento económico de Castro Urdiales
El Ayuntamiento de Castro Urdiales valorará recurrir al Tribunal Supremo la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC) que obliga a compensar a la empresa ASCAN con 5.161.458 euros por el desequilibrio financiero en la concesión de la gestión integral del agua del municipio, de la que es titular la mercantil.
Así lo ha manifestado este lunes el alcalde de Castro Urdiales, Ángel Díaz-Munío, tras conocerse la noticia la semana pasada. El regidor municipal ha afirmado que mantendrán una reunión con los abogados el próximo jueves 24 para “discutir las posibilidades” de que el TS les de la razón, así como “el incremento del coste que pueda suponer acudir a una instancia superior”.
En caso de no acudir al TS, el Consistorio castreño, con un presupuesto de 33 millones de euros, tendrá que hacer frente a esa cantidad de cinco millones que “repercutirá de manera importante en el funcionamiento económico del Ayuntamiento y afectará al presupuesto y a la capacidad de inversión”.
Díaz-Munío ha asegurado que harán “todo lo posible para minimizar los daños”, como “único mensaje positivo” que ha podido dejar en la comparecencia ante los medios.
Cuando el seguimiento de la causa vuelva al Tribunal Contencioso Administrativo “argumentaremos que en este momento no podemos afrontar de una forma total el pago de la sentencia y pediremos un aplazamiento o un fraccionamiento del mismo”, ha explicado el alcalde.
Asimismo, ha recordado que “puede haber más reclamaciones” por parte de la empresa ASCAN, puesto que el periodo que les condena la sentencia va desde 2007 a 2013, por lo que “existe el riesgo de que reclamen el desequilibrio económico comprendido entre 2013 y 2016”. “Pensamos actuar para prevenirlo”, ha subrayado.
Seguimiento del contrato
Díaz-Munío ha recalcado que el seguimiento del contrato por parte del Ayuntamiento “quizá no ha sido de la misma intensidad y con los mismos argumentos que ha podido tener la concesionaria”, un hecho que ha provocado que “estemos hoy en esta situación”.
“El Ayuntamiento tenía la previsión para hacer el seguimiento de ese contrato a través de la Mesa del Agua, la cual no ha sido un instrumento válido para ello”, ha señalado el regidor. “Cuando nosotros hemos llegado al equipo de Gobierno y hemos tomado la responsabilidad de resolver este problema, el diagnóstico que hicimos es que los instrumentos de seguimiento de este contrato no eran los adecuados”, ha subrayado Díaz-Munío.
El alcalde ha destacado que ésto último lo ha afirmado “públicamente” y que lo han “discutido y debatido dentro de la Corporación”. Ha recalcado que desde que gobiernan “han llevado a cabo ese análisis y han comenzado el seguimiento del contrato como es normal hacerlo, es decir, a través de un grupo de trabajo y de una serie de reuniones para conseguir que los argumentos presentes puedan compensar las reclamaciones que pueda hacer el contratista”.
Así pues, el alcalde ha expresado la necesidad de “atacar las causas” que les acusan de haber llegado al desequilibrio: inversiones realizadas en los proyectos de agua y de saneamiento, el incremento en la recaudación ejecutiva que corresponde al Ayuntamiento, la mejora de la red de agua y la reducción de costes.
“Tendremos que tratar con ASCAN en qué medida, ya de una forma práctica, entienden que debemos hacer estas correcciones en lo que hasta ahora ha sido el comportamiento del Ayuntamiento”, ha manifestado.