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ARCA cuestiona la reordenación de los espacios ferroviarios impulsada por el Ministerio de Fomento en Santander

El plan de reordenación de los espacios ferroviarios de Santander, largamente demandado y siempre pospuesto por la coyuntura económica y política, no ha hecho más que dar unos tímidos pasos con el derribo de algunas naves en desuso, pero ya se ha encontrado las primeras voces críticas por priorizar la construcción de más edificios en una zona muy saturada de la ciudad frente a la posibilidad de impulsar una gran zona verde que actúe a modo de pulmón urbano.

Así lo ha manifestado este martes a través de un comunicado la organización ecologista ARCA, muy activa siempre en la fiscalización de este tipo de macroproyectos urbanísticos en Cantabria, y que ha criticado abiertamente los planes del Ministerio de Fomento que lidera el exalcalde Íñigo de la Serna (PP).

“La propuesta del Ministerio carece de la más elemental visión urbanística y en ella no se ha priorizado el interés general de la ciudad y de los vecinos de la zona. Es una propuesta hecha con visión cortoplacista y nada ambiciosa que no está a la altura de lo que Santander necesita, por carecer de la visión global y a largo plazo, de lo que la ciudad ha de priorizar en ese espacio que ofrece posibilidades únicas, históricas e irrepetibles para una adecuada ordenación urbana”, resumen desde ARCA.

En esta misma línea, el colectivo conservacionista ha tachado de“ilógico” que en el distrito más densamente construido de Santander, con menos espacios libres y en pleno centro de la ciudad, como es el barrio de Castilla-Hermida, “la política que se pretenda aplicar sea precisamente construir aún más edificios”.

A su juicio, con un espacio tan singular, estratégico y extenso, “no es admisible andar improvisando soluciones fragmentadas sin contemplar el uso de todo el territorio que se liberaría entre Peñacastillo y las estaciones”. Por ello, desde ARCA han defendido que hay que establecer primero la vocación global y la finalidad integral de toda la extensa franja de suelo a liberar, que abarca desde Cajo y La Remonta hasta la actual ubicación de Renfe y Feve.

Propuesta verde

Ante este escenario, y antes de que las administraciones públicas implicadas -Ministerio de Fomento, Ayuntamiento de Santander y Gobierno de Cantabria- pongan en marcha la propuesta impulsada por el departamento que dirige De la Serna, ARCA ha propuesto que toda la franja de terreno ocupada por las instalaciones ferroviarias que se puedan liberar pase a ser un extenso corredor verde con ambientación de parque urbano naturalizado, en la que puntualmente pueda ubicarse algún equipamiento social que esté justificado.

Igualmente, la organización ecologista ha propuesto a la Corporación municipal santanderina que “trabaje para conseguir este gran corredor verde” y que “priorice el interés más conveniente a largo plazo para la ciudad y sus habitantes”.

“Cuando hace tres décadas ARCA propuso la vaguada de Las Llamas como gran corredor verde, ya entonces hubo expertos urbanistas que plantearon la necesidad de priorizar el espacio ferroviario en el centro, como la futura e irrepetible oportunidad de conseguir otro corredor verde al que Santander no podía renunciar”, recuerda la asociación.

Según han explicado, este corredor comprendería desde Peñacastillo y el parque de La Remonta hasta las actuales estaciones, “aportando un enorme beneficio vital a los vecinos de Castilla-Hermida y a todos los santanderinos, una oportunidad única para acercar el diseño urbano de Santander a los parámetros de otras ciudades europeas y españolas, de orientación urbanística más moderna y democrática, en las que se priorizan las condiciones ambientales y  los intereses sociales de la gran mayoría de la población y la prevalencia de los espacios libres públicos”, han concluido.