La Asamblea Antifascista de Cantabria ha denunciado el “ataque nazifascista” por parte de tres individuos durante la manifestación del sábado en Santander contra la celebración del festival ultra Galerna Fest -a la que acudió medio millar de personas- y ha criticado la actuación policial e institucional respecto a las concentraciones y la celebración del evento.
En concreto, afirman haber sufrido “un ataque fascista por parte de tres individuos que recorrieron la manifestación insultando, amenazando e intentando robar banderas” de las personas presentes en la movilización, que no fue “a mayores por la respuesta rápida de las personas cercanas”, tal y como han indicado en nota de prensa.
Asimismo, la organización ha criticado la actuación policial durante esta manifestación antifascista de carácter pacífico, “al pretender las autoridades detener la marcha antes del lugar donde se tenía autorización para finalizar la convocatoria”. Además del “ataque” a la movilización antifascista, este colectivo ha denunciado que durante los días previos también se produjo “la persecución e intimidación a varios activistas antifascistas”.
En relación a la manifestación convocada ese mismo día por los organizadores del festival, la asociación ultraderechista Alfonso I, la Asamblea Antifascista ha censurado la “colaboración” de la Delegación del Gobierno con la misma, al “permitirles ocupar vías públicas que no estaban legalmente comunicadas por los convocantes”. A esto se suma el “agravante”, ha apuntado, de que para ello “se desalojó a las compañeras de las Asambleas Feministas de Cantabria del Ayuntamiento de Santander donde estaban realizando una actividad en favor del aborto”.
Según el colectivo antifascista, no se trata de alarmar sobre el carácter fascista y racista del Galerna Fest, sino de advertir de “un problema grave que corre el riesgo de derivar en disturbios raciales semejantes a los acaecidos en el Reino Unido este verano” debido, ha señalado, a la “instrumentalización por parte de la extrema derecha, culpando al extranjero o al diferente de las pésimas condiciones laborales de los y las trabajadores, la falta de vivienda digna, recortes en los servicios públicos o las altas tasas de paro”.
Finalmente, la Asamblea Antifascista de Cantabria ha mostrado su deseo de que el próximo año “no se vuelva permitir la realización de este mal denominado festival cultural” porque “la cultura no está para diseminar discursos de odio ni cualquier otro evento nazi-fascista similar”. Finalmente, han asegurado que, en caso de realizarse, “les volverán a encontrar en frente y redoblarán esfuerzos para cuadruplicar el número de manifestantes mediante la unión de todas las fuerzas, progresistas, socialistas, comunistas, anarquistas o simplemente ciudadanos demócratas”.