La delegada del Gobierno en Cantabria se ha mostrado este miércoles abiertamente contraria a las concertinas instaladas en el Puerto de Santander para frenar la entrada a los polizones albaneses. “Estoy totalmente en contra”, ha manifestado, tras insistir de nuevo en que esta medida “concierne única y exclusivamente a la Autoridad Portuaria”.
Ainoa Quiñones se ha posicionado de esta forma a preguntas de la prensa durante una comparecencia en la que ha presentado una inversión del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico de más de seis millones en actuaciones de mejora de la eficiencia energética de varias dependencias de la Policía Nacional, la Guardia Civil e Instituciones Penitenciarias en Cantabria.
Quiñones, que hace un mes evitó valorar las concertinas, ha expresado ahora su posicionamiento en contra de las mismas al ser cuestionada por las más de 40.000 firmas registradas en el Parlamento de Cantabria solicitando su retirada. Promovidas por la ONG Pasaje Seguro, el colectivo reclama que la Cámara autonómica tramite de forma rápida una proposición no de ley en contra de “una medida cruel, inhumana, y inútil, que amenaza y criminaliza a personas migrantes sin evitar los intentos de acceso al puerto”.