El juez Pedraz implica al presidente de la Federación Cántabra de Fútbol en los “entresijos” de Villar
El auto del juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz por el que se ha decretado prisión provisional sin fianza para el presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), Ángel María Villar, y para su hijo, Gorka Villar, pone de manifiesto la estrecha vinculación entre el máximo mandatario del fútbol español y el presidente de la Federación Cántabra, José Ángel Peláez.
El auto de 44 páginas, consultado por eldiario.es Cantabria, sostiene que Peláez apoyó la reelección de Villar como presidente a cambio de favores, como recibir dinero o entradas, e incluso que presionó a otras federaciones para que también respaldaran al mandatario. Además, el magistrado cree que Peláez es “conocedor” de los “entresijos” de la RFEF.
Esos “entresijos” se refieren al “entramado” creado supuestamente por Villar para desviar fondos, tanto públicos como privados, para su enriquecimiento y el de terceros y para establecer un “clientelismo” que le garantizara seguir al mando a través de la “compra de votos” de las federaciones territoriales.
Tal y como señala el auto, la supuesta implicación de Peláez en la trama se deduce de las conversaciones intervenidas por la Guardia Civil durante este mismo año, así como por un correo electrónico que envió al exsecretario de la RFEF en enero de 2013, en el que el líder autonómico “insinúa que podría haber difundido documentación acreditativa de actividades presuntamente delictivas que afectan a dirigentes de la RFEF, y no lo hizo”.
En esta investigación, el presidente de la federación cántabra aparece como uno de los hombres fuertes de la RFEF y hombre de confianza de Villar y de su hijo. El informe judicial, en el que Peláez aparece mencionado hasta en 28 ocasiones, abre un capítulo especial dedicado al “favorecimiento a la Federación Cántabra”.
Así, se transcriben conversaciones en las que el tesorero de la Federación nacional, José Luis Larréa, y el exseleccionador Javier Clemente muestran su rechazo a que la RFEF tenga que pagar más de 300.000 euros a la cántabra para un campo no homologado y que tampoco es propiedad de la Federación, sino del Ayuntamiento de Santander. En concreto, hablan de la inversión de 321.000 euros para renovar el césped de los campos tres y cuatro de las instalaciones Nando Yosu, en La Albericia.
Pese a esos reparos, el propio Villar traslada a Peláez que ya ha dado la autorización para el pago y subraya que ha sido en unas condiciones que “no he hecho nunca”. En esa misma llamada, Peláez le traslada que necesita que el dinero le llegue directamente a él para “yo liberalizar los fondos míos y luego yo hacer los pagarés”.“Tú lo que quieres es el dinero ingresado en tu cuenta, vale de acuerdo”, responde Villar.
“Si no se lo lleva él, no lo quiere”
Sobre este mismo asunto, el tesorero se queja ante el vicepresidente de la Federación, Juan Padrón, de que le ha ofrecido el dinero a Peláez en un pagaré para la empresa Mondo -encargada de la sustitución del césped- pero éste le ha dicho que “si no se lleva él el dinero y lo mete en su cuenta que no lo quiere”, a lo que Padrón le responde: “Él quiere el dinero para manejarlo él, para hacer lo que quiera... como lo hizo con Torrelavega”.
En este caso se refieren a la reforma en el campo de Tanos. La obra se ejecutó en el año 2013 y la Federación Española aportó 250.000 euros, si bien la Federación cántabra tardó años en pagar al Ayuntamiento de Torrelavega, según reconoció el propio concejal de Hacienda, Pedro Pérez Noriega.
La conversación entre el tesorero y Padrón concluye manifestando el primero su queja porque Villar le ha “obligado” a darle “un anticipo de 100.000 euros” a Peláez.
Compra de voluntades
El juez concluye que existe una “alta probabilidad” de que el apoyo del presidente de la cántabra hacia Villar para favorecer su reelección “ha estado motivada o ha sido premiado, además de con su renovación en la Comisión Delegada de la RFEF, con la concesión de un pago de dinero, aun cuando existían dudas en algunos gestores del patrimonio de la RFEF sobre la conveniencia de éste”.
Finalmente, las investigaciones también apuntan que Peláez estaría implicado en las presiones a la Federación de Ceuta para que suscribiera una carta de advertencia al Tribunal Administrativo del Deporte (TAD). El 12 de mayo, Peláez, informa de que el presidente ceutí ha cambiado de opinión. “O sea, ha servido lo que le he dicho”, comenta Villar. “Yo creo que lo ha entendido de puta madre”, certifica su empleado.
“Para lo que te salga de los huevos”
En una conversación mantenida hace escasamente un mes, el 15 de junio, Peláez le comunica a Villar que ha dejado fuera del reparto de los presupuestos de la RFEF unos cinco millones doscientos mil euros para uso potestativo, llegando a decirle que dichas cantidades las puede usar “para lo que se te ponga en los huevos”.
Según le explica Peláez al presidente, esos más de cinco millones son para “uso discrecional” y están “ajenos” a los mecanismos de fiscalización y control, ya que “ese dinero no pasa por la Asamblea General”, de modo que no se tiene que informar de su destino.
Añade Peláez que dicha cuantía se puede incrementar hasta los seis millones de euros, y que como el concepto en el que se puede emplear es “fútbol aficionado” en general, noción extensa y etérea, “la realidad es que el dinero puede utilizarse para fines distintos”, según recalca el magistrado.
Respuesta de Peláez
El presidente de la Federación Cántabra se ha defendido a través de su página de Facebook en la que ha asegurado que esas declaraciones están fuera de contexto e indica que la conversación en la que le dice a Villar que puede utilizar esos 5 millones de euros “como le salga de los huevos” es porque no es una partida finalista y puede repartirla a su criterio para alcanzar los objetivos presupuestarios de la RFEF.
“Si uno lee esa frase así parece que le estoy diciendo toma 5,2 millones y llévatelos a Brasil. Pero estábamos hablando exclusivamente del reparto para los clubes no profesionales”, subraya Peláez.
Igualmente, niega en rotundo haber recibido dinero en su cuenta personal -“cualquiera sabe que los fondos de la RFEF tienen destino finalista y son siempre para ingresar en cuenta”- y explica que pasó de ser opositor a apoyar a Villar “por el conocimiento que tenía de que Ángel iba a quitar de la Federación a Juan Padrón y a José María Castillón, que para mí son dos auténticos corruptos”.