La Universidad de Castilla-La Mancha apuesta por sus estudiantes. Se ha empeñado en que los que quieran estudiar y tengan posibles barreras económicas que se lo impidan, la institución las eliminará con lo que han llamado ayudas de emergencia. Este curso será el tercero que se cumpla desde que se pusieron en marcha por primera vez. Cuenta Beatriz Cabañas, vicerrectora de los estudiantes de la UCLM, que este año cuentan con “120.000 euros procedentes únicamente de los fondos de la universidad”, y no como ediciones pasadas que el Gobierno regional o el sindicato de CCOO aportaban una parte de la cantidad total que posteriormente se repartía al alumnado solicitante.
En la primera etapa de estas ayudas de emergencia, había un plazo de presentación de solicitudes del 7 al 20 de octubre. Entonces se presentaron 278 solicitudes, de las cuales se aprobaron 141 y fue a las que se les concedió la ayuda. Una vez conocido el resultado de concesiones y denegaciones, se ha abierto un plazo de alegaciones y a su vez se va a poner en marcha la segunda etapa de las ayudas de emergencia de la UCLM. El nuevo periodo se prolongará hasta el 15 de abril y tiene como objetivo ayudar a los estudiantes que hayan tenido o tengan una situación difícil tras cerrarse la convocatoria del día 20 de octubre.
“Todos los estudiantes que tengan algún problema que les impida pagar su matrícula, total o parcialmente, pueden pedir esta ayuda en los mismos términos”, explica Beatriz Cabañas, que destaca que cuentan con el presupuesto de 120.000 euros, antes citado, que se desglosa en 100.000 euros destinados a repartir en la primera fase de la convocatoria y 20.000 en esta segunda fase. El presupuesto con el que se cuenta para este curso, además de ser aportado íntegramente por la UCLM, es la mayor cantidad de la que se dispone en comparación a las otras dos convocatorias.
La vicerrectora deja claro que “no es una beca que sustituya a la del Ministerio, es una ayuda pensada para mitigar, contribuir, a paliar las dificultades” y ambas pueden ser compatibles. Cabañas dice que las cuantías concedidas por alumno “no llega nunca a los 2.000 euros”. El dinero está destinado a pagar los estudios porque “nuestras matrículas no son de las más caras” y si sobra algo de dinero tras ese pago, “se le da al estudiante” para otros gastos que tenga que sufragar. Importante saber que en estas ayudas “excluimos a los de Máster”.
Como en otras becas o ayudas, en las de la UCLM hay unos requisitos, pero son menores que los de las becas del Ministerio. Como condición principal está aprobar el 50% de los créditos, menos en las carreras técnicas que se pide un 40%. En cuanto a la nota de corte, no se excluye a nadie por ella, incluso tampoco por renta salvo que “el patrimonio se pase una barbaridad”. Con esas pautas sencillas y básicas, queda claro que si realmente hay algún estudiante que quiera estudiar y necesite un impulso económico, no tendrá que ir muy lejos porque su propia universidad, la UCLM, está dispuesta a ayudarle.