Tras la polémica que suscitó la decisión de derivar a la residencia Virgen del Prado de Talavera de la Reina a pacientes con COVID-19 con “el alta hospitalaria” pero que “precisan terminar su etapa de cuarentena y no pueden volver a su domicilio por determinadas circunstancias”, la Consejería de Sanidad ha decidido dar marcha atrás y no trasladar a estos pacientes a este centro socio-sanitario, en el que aún no están vacunados ni usuarios ni residentes y contaba con tres casos positivos de coronavirus.
En cambio, si los desplazará a la residencia de mayores de Villacañas, donde ya se han atendido más pacientes así. Al contrario que en la residencia talaverana, en este centro socio-sanitario del municipio toledano al que la Junta ya destinó el pasado mes de agosto 80.000 euros a la atención de pacientes de COVID-19, sí que comenzó el proceso de vacunación de contra la COVID-19 el pasado 12 de enero, según informaba el propio centro en sus redes sociales, por lo que a sus usuarios y trabajadores les faltaría la segunda dosis.
Esta decisión llega después de que este mismo lunes la Junta defendiera el traslado a Talavera afirmando que la residencia dispone de “habitaciones aisladas, con un circuito sectorizado, independiente y totalmente seguro para los residentes del centro, con una entrada específica para las personas que puedan venir de fuera y sin que estén en contacto con los residentes”.
Sin embargo, tras la presión sindical y las críticas tanto de familiares y residentes del mismo centro -que se manifestaban a las puertas de la residencia este lunes- como de los partidos de la oposición en el Parlamento regional -PP y Cs-, Sanidad ha reculado en esta decisión y derivará a estos pacientes al municipio toledano de Villacañas, donde ya esteban derivando pacientes desde el Complejo Hospitalario de Toledo.
En este sentido, el sindicato de CSIF ha celebrado que la Consejería haya paralizado el traslado de pacientes con alta hospitalaria pero, a su vez, lamenta que “se traslade el problema a Villacañas”. Por ello, ha vuelto a reclamar a la Junta que “no utilice ninguna residencia de mayores, así como ningún espacio asistencial con usuarios vulnerables, para que pacientes con COVID con alta hospitalaria realicen el periodo de aislamiento”.
CSIF apuesta por medicalización de hoteles o espacios y centros públicos
Dicho sindicato considera que existen soluciones alternativas para descongestionar los centros hospitalarios, “tales como la medicalización de hoteles -una iniciativa en la que está insistiendo Ciudadanos- o espacios y centros públicos, la instalación de hospitales de campaña o la apertura y habilitación de nuevos puntos de la red sanitaria, como el nuevo Hospital Universitario de Toledo”.
En un comunicado, el sindicato considera “una negligencia que su utilicen las residencias de mayores como espacios COVID, no sólo por la existencia de usuarios y trabajadores no vacunados, sino por suponer un riesgo innecesario mientras se completan los ciclos de inmunización”.
Por último, CSIF ha indicado también que espera que la Consejería de Sanidad y Bienestar Social informen “adecuadamente y con la antelación debida, tanto para evitar errores como el producido en Talavera como para evitar las situaciones de alarma vividas por las familias de los residentes y los propios trabajadores del centro, además de escuchar a los profesionales de ámbito sanitario para la gestión de la pandemia en los centros asistenciales”.