Clara Sánchez vuelve a la caza de nazis en 'Cuando llega la luz'

Consciente de las muchas ampollas que levantó su primera novela sobre viejos nazis en España, Clara Sánchez publica la segunda parte de esta historia en la que advierte sobre sus sucesores y el auge de los movimientos de ultraderecha, eso sí, sin dar nombres reales porque, dice, no es una heroína. Tras publicar en 2010 la novela 'Lo que esconde tu nombre, donde descubría la existencia de antiguos nazis escondidos en el Levante español, Clara Sánchez recibió cartas intimidatorias de filonazis y familiares de alguno de los mencionados en el libro, que le dejaron “muy mal sabor de boca”, por lo que dejó pasar el tiempo, ha explicado hoy la autora en una entrevista con Efe.

“Pero me pedía el corazón seguir con la historia”, señala Clara Sánchez, que recibió el Premio Nadal por esta novela de la que se han vendido más de un millón de ejemplares y que protagonizan el anciano Julián y la joven Sandra, que se enfrentan a una red de viejos nazis en Denia.

En su nueva novela 'Cuando llega la luz', publicada por Destino, ha evitado citar los nombres reales de esos nazis que aún permanecen en España porque quiere que los lectores disfruten de la historia más allá de las identidades, aunque hay alguno al que se refiere por su apodo verdadero, como el “carnicero de Mauthausen”. “Un lector me dio la clave de esas amenazas: me había metido en las intimidades de esos viejos nazis”, recuerda la autora que hace años vivió en Denia cerca de uno de ellos.

Han pasado dos años desde que Sandra y Julián descubrieron la red de nazis residentes en el tranquilo pueblo de Dianium y ahora la joven, madre de un bebé, vive en Madrid y Julián pasa sus días en una residencia de ancianos en esa localidad levantina siguiendo de cerca a alguno de ellos.

Y es que Clara Sánchez asegura que muchos de estos criminales huidos en las playas españolas han pasado su vejez camuflados en establecimientos de este tipo. Sandra y Julián tendrán que enfrentarse a ellos y también a sus jóvenes aprendices, que no solo idolatran a figuras como “el carnicero” sino que empiezan a usurparles el poder.

El nuevo líder

Sancho es en la novela el personaje que se erige como nuevo líder, inspirado en neonazis que la escritora ha conocido y que le inspiran una gran preocupación porque “no son lo que parecen”. “Son monstruos que se esconden bajo una sonrisa y una cara agradable” porque, agrega, “no todos los nazis llevan la cabeza rapada y tatuajes en la nuca”. Son personas que “campan por Europa de una forma alarmante” con su ideología fanática y por la que es fácil “dejarse llevar”.

En esta novela, Julián, de 80 años y antiguo preso de Mauthausen, lucha contra su propio cuerpo y sus achaques para poder seguir luchando contra esos criminales mientras que Sandra contará con un “obstáculo”, su hijo, un bebé.

“Son dos grandes héroes que nunca han querido serlo”, explica la autora, que introduce también en la historia al padre del niño y a su novia, Lucy, una cándida joven “cuya ingenuidad la hace sabia”, explica Sánchez. Pero en esta historia también se habla que los límites, de lo que las personas son capaces de hacer por amor y de lo que pasa “cuando los buenos a veces se cansan de ser tan buenos”.

De los personajes de todas sus novelas, Sandra y Julián, dice su creadora, son los “más potentes” y por eso reconoce que le gustaría escribir una tercera novela con ellos. “No sé cuando la escribiré porque nunca he planificado mi vida literaria, pero no lo descarto”, indica.