Comienzan las obras “urgentes” para restaurar la Venta de Borondo

La Asociación Cultural Venta de Borondo y Patrimonio Manchego ha anunciado el inicio de las obras urgentes de restauración parcial de este edificio ubicado en Daimiel (Ciudad Real) en las zonas más dañadas que afectan al torreón y al alzado oeste.

Se trata de una actuación, apuntan, que se realizará “casi culminando el Año Europeo del Patrimonio Cultural y tras dos años de intenso trabajo para rescatar de un inminente derrumbe una de las últimas ventas manchegas del siglo XVI”.

Esta actuación de emergencia sobre el edificio catalogado como Bien de Interés Cultural ha podido llevarse a cabo gracias al apoyo económico de diferentes personas y entidades. Tras los 6.000 euros obtenidos gracias al concurso Semilla Soliss (Fundación Soliss), se obtuvo 13.267,65 euros de una subvención de áreas de influencia socioeconómica de Parques Nacionales de Castilla-La Mancha.

En la línea de colaboración con empresas, J. García Carrión ha contribuido con el aporte de materiales de construcción. También se dispone del dinero recaudado de la venta de la novela de José Aranda La Venta de Borondo, de la recaudación de la ruta de senderismo a la Motilla del Azuer organizada por Ayuntamiento de Daimiel, así como de las aportaciones de los miembros de la asociación y donaciones recibidas por parte de todas las personas interesadas en rescatar este edificio cervantino. De igual forma, dicen, “seguimos abiertos a nuevas colaboraciones que puedan impulsar el coste de esta intervención de urgencia”.

Dicha intervención cuenta con todos los permisos y autorizaciones administrativas preceptivas al tratarse de un monumento protegido. La dirección arqueológica de las obras está siendo realizada por los arqueólogos Miguel Torres, Honorio Álvarez y la restauradora Isabel Angulo. Teodoro Sánchez –Migallón ha sido el arquitecto encargado de la redacción del proyecto de restauración y la coordinación de seguridad y salud por parte del arquitecto técnico Juan Javier Aparicio. La ejecución de la obra se está llevando a cabo por parte de la empresa Construcciones RIM.

Los miembros de la Junta Directiva de la asociación han mostrado un firme compromiso con su causa inicial, supervisando y gestionando todos los pasos necesarios para poder llevar a cabo la obra, sin dejar de destacar el apoyo por parte de los propietarios de la venta.

“A pesar del optimismo que se desprende de las imágenes con la torre estabilizada, es importante no olvidar que esta intervención solamente evita el peor de los finales para el edificio, ya que este sigue estando en estado ruina y su recuperación integral solo puede tener lugar a un medio o largo plazo”, advierte.

Para ello apuntan que “hay que plantear un proyecto integral de restauración así como unos usos específicos para el edificio y zonas anexas”. La asociación sigue trabajando en este proyecto para insistir en la recuperación de esta venta manchega. La obra de restauración comenzó a finales de noviembre y se estima su finalización antes de fin de año.