Los docentes interinos cierran el curso reclamando el cobro del verano y su “dignidad laboral”
El final del curso escolar en Castilla-La Mancha se ha convertido en todo un acto de protesta por parte de los profesores interinos. Decenas de personas han vuelto a concentrarse en las cinco capitales de provincia de la región, convocados por CCOO, UGT, ANPE, STE y CSIF para pedir un contrato anual para el profesorado interino, de forma que este colectivo de docentes pueda cobrar todo el verano, al igual que sucedía antes de los recortes en educación que realizó el Gobierno anterior de María Dolores de Cospedal.
A estas concentraciones, celebradas ante las direcciones provinciales de Educación de la Junta, también se han sumado las Mareas Verdes en defensa de la educación pública así como representantes de la Asociación de Docentes Interinos de la comunidad autónoma.
De esta forma, todos los sindicatos con representación en el sector educativo han vuelto a estar presentes en las protestas, donde sus portavoces han recordado que este colectivo de profesores de Castilla-La Mancha sigue siendo el único que no percibe su sueldo en el verano sufriendo una “medida injusta no tanto en lo económico como en lo administrativo, que hace mantener agravios comparativos con respeto a otros trabajadores de otras regiones”.
Es el motivo por el que los servicios jurídicos de algunos sindicatos como CSIF han puesto en marcha una campaña para que los interinos de la región puedan presentar denuncias para reclamar el cobro de los meses de verano. Esperan un “aluvión de demandas”.
Las peticiones han vuelto a dirigirse tanto al consejero de Educación, Ángel Felpeto, como al presidente autonómico, Emiliano García-Page, a los que piden negociar de forma inmediata el plan de mejora de la educación regional, con el objetivo de que los resultados sean palpables en septiembre, cuando arranque el nuevo curso.
Entre las mareas, la más activa sigue siendo la de Albacete, quien ha acordado con la Asociación de Docentes Interinos de Castilla-La Mancha mantener estas movilizaciones hasta final de curso, ante la “discriminación y agravio comparativo laboral” que recibe este profesorado en la región. “No somos de usar y tirar”, afirman desde este colectivo.