La ecología es uno de nuestros principales intereses y es el centro de este blog: cambio climático, medio natural, desarrollo sostenible, gestión de residuos, flora y fauna, contaminación y consumo responsable, desde el punto de vista de periodistas, expertos, investigadores, especialistas y cargos públicos. También editamos la revista 'Castilla-La Mancha Ecológica'.
La vida “oculta” de los residuos urbanos
Diariamente, miles y miles de residuos son generados en nuestras casas, bien sean restos de comida, plásticos, cartón… Pero, ¿alguna vez te has preguntado qué hay más allá del cubo de basura? Hoy quier hablar de esa cara “oculta” y de cómo son gestionados en España, desmintiendo a la vez algún que otro mito sobre el reciclaje.
En primer lugar hay que destacar que existen varios tipos de residuos: aquellos que son de origen industrial, agrícola o minero, los cuales son homogéneos en su composición; y los residuos urbanos. Estos últimos son muy heterogéneos y por lo tanto engloban a aquellos generados en los comercios, en las casas, en la limpieza de calles y jardines, los residuos especiales (como vehículos en fuera de uso) y aquellos asimilables no peligrosos. Es debido a su heterogeneidad por lo que deben ser tratados adecuadamente.
Una vez generado el residuo, su recogida en las calles dependerá de si estos han sido depositados en los contenedores de forma mezclada o separada. En el segundo caso, en nuestro país hay contenedores de papel, envases, vidrio y residuos orgánicos. Es la conocida como recogida selectiva y su ubicación ha sido estudiada en profundidad para facilitar lo más posible la tarea al ciudadano. Los residuos como pilas, pinturas (considerados como peligrosas) y aquellos más voluminosos (muebles) deben ser llevados a puntos limpios (o pueden ser recogidos -si así se solicita- por la empresa contratada por el Ayuntamiento).
Bien, ya hemos llevado el residuo a su respectivo contenedor pero ¿qué ocurre a continuación? Se procede a su recogida, siendo con camiones la que más predomina por el momento. En el interior de los vehículos los residuos serán compactados o no según al tipo al que pertenezcan. Sin embargo, existe otro método de recogida más innovador que se llama recogida neumática. Se está implantando en las nuevas urbanizaciones y, aunque supone una gran inversión inicial, genera menos molestias y menos desembolso en el coste del personal. Consiste en una serie de tubos conectados a unas tuberías subterráneas que conducen el residuo mediante corrientes de aire hasta plantas de transferencia donde se depositan para su posterior tratamiento.
Todos estos residuos van a parar a las estaciones de transferencia, en las que se almacenan temporalmente hasta que un camión más grande los transporta hasta el lugar de tratamiento. Esto ahorra muchas molestias a los vecinos y el coste de transporte es menor que si fueran directamente todos los camiones más pequeños a la planta (además de suponer un ahorro medio ambiental).
Y por último (pero no menos importante) viene el tratamiento. En el caso de que se haya separado anteriormente los residuos, la tarea se facilita, pero, o bien por un desconocimiento del reciclaje por parte del ciudadano o por errores que se hayan podido cometer, se realiza una separación que dependerá de la fracción que contenga: metales, plásticos, vidrios, papel… quedando como producto final la materia orgánica restante. Una vez realizado este paso, dichos residuos se reciclarán para darles un nuevo uso, se incinerarán (para obtener energía) o, en el peor de los casos, acabarán en el vertedero.
Desmintiendo algunos mitos…
¿Alguna vez has oído aquello de “yo no reciclo, pues luego el camión lo echa todo en el mismo sitio”? Esto en realidad no es así. En días alternativos pasan distintos tipos de camiones para cada tipo de residuo, y sí, hay camiones que lo echan todo en su interior, pero lo que no sabes es que en su interior existen compartimentos donde los mantienen separados. Que no lo veas no significa que no sea cierto, ¿no?
¿Y aquel dicho de “al llegar a la planta de tratamiento lo juntan todo y acaba en el vertedero”? Pues bien, esto también es un mito, y es que es de locos pensar que aquel esfuerzo empleado en mantener todo separado se eche a perder en el final del trayecto. Es cierto que, como se ha comentado antes, en las plantas de tratamiento se realiza una separación de residuos, pero esta no es totalmente eficaz, y con las grandes cantidades que generamos diariamente en las ciudades, las maquinarias no dan abasto.
Es por eso que las labores de reciclaje son importantes ya que este proceso se facilita y la eficiencia de obtención de productos reciclados aumenta. Aparte, el vertedero es la última opción de todas, a la cual se llega cuando no existe más remedio. Además, el vidrio y el plástico pueden reciclarse las veces que se quiera sin que pierdan sus propiedades (a pesar de que se diga lo contrario).
Y este siguiente comentario suena familiar para los toledanos: “En el Casco Histórico de Toledo no se recicla porque no existen contenedores apropiados y al final lo acaba recogiendo el mismo camión de residuos orgánicos”. Pues bien, esto también es falso, puesto que recientemente el Ayuntamiento ha impuesto un nuevo sistema de recogidas tanto para los comercios como para las viviendas y, mediante el famoso método “puerta a puerta”, durante un horario y unos días establecidos, se recogen los diferentes tipos de residuos, de tal forma que los lunes y jueves serán recogidos los plásticos y envases, los martes y viernes el papel y cartón, y los miércoles y sábados el vidrio. Aquellos que lo incumplan serán sancionados.
Por lo tanto, ahora que te hemos contado lo que existe detrás del gesto de tirar la basura, es tu decisión la que hará que esto sea cada vez más posible, proporcionando una nueva vida a aquello que antes no la tenía.
Diariamente, miles y miles de residuos son generados en nuestras casas, bien sean restos de comida, plásticos, cartón… Pero, ¿alguna vez te has preguntado qué hay más allá del cubo de basura? Hoy quier hablar de esa cara “oculta” y de cómo son gestionados en España, desmintiendo a la vez algún que otro mito sobre el reciclaje.
En primer lugar hay que destacar que existen varios tipos de residuos: aquellos que son de origen industrial, agrícola o minero, los cuales son homogéneos en su composición; y los residuos urbanos. Estos últimos son muy heterogéneos y por lo tanto engloban a aquellos generados en los comercios, en las casas, en la limpieza de calles y jardines, los residuos especiales (como vehículos en fuera de uso) y aquellos asimilables no peligrosos. Es debido a su heterogeneidad por lo que deben ser tratados adecuadamente.