Es “inaceptable” para Castilla-La Mancha excluir la cabecera del Tajo de los planes contra la sequía
“No hacer nada también es tomar una posición”, ha dicho el portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Nacho Hernando, sobre la posibilidad de que la cabecera del Tajo quede excluida tanto de los planes de sequía como del futuro Pacto Nacional del Agua, tal y como ha denunciado Ecologistas en Acción. Concretamente, ha calificado como “inaceptable” no solo la falta de medidas por la ausencia de lluvias sino también que el Ejecutivo de Mariano Rajoy siga considerando que existen “ríos de primera y de segunda”. “Lo que está en juego es algo más que un debate partidista que no estamos dispuestos a aceptar”, ha recalcado.
La intervención del portavoz de la Junta ha versado en su mayor parte sobre la situación de sequía en todo el país, criticando que no haya ningún “otro punto en el orden del día” del Gobierno central que no sea la crisis catalana. Según ha afirmado, las consecuencias de la falta de lluvias es “tan urgente como Catalunya” y por ello el presidente, Emiliano García-Page, sigue reclamando una reunión en Moncloa por la situación en esta comunidad autónoma pero también en todo el país, con un pacto nacional del agua que implique “soluciones para todos”.
Según ha dicho, el Gobierno castellano-manchego ha sido capaz de “reenfocar” un debate para que vaya más allá de los intereses partidistas y ha demostrado que sus quejas en torno a la situación de la cabecera del Tajo y de su trasvase a Levante no se realizaban “para crispar” ni para “vencer” sino para “convencer” al resto de afectados de que llegaría un momento en que no se podría utilizar más, como ahora sucede.
Previamente, se ha referido a la manifestación en Murcia de los regantes de esta región. “Están en su absoluto derecho, y desde el respeto y la empatía consideramos con firmeza y convicción que si este es el estado de los embalses de cabecera, tienen todos los motivos del mundo en Levante para estar preocupados”. Mostrando una imagen del estado de la cabecera del Tajo, Hernando ha dicho que si la economía murciana depende “de esta tierra agrietada y este secarral por culpa de la gestión” del Gobierno de Rajoy, “tienen toda la razón del mundo en estar preocupados como lo estamos en el resto de España”.
“Este país está pasamos por un duro trance”, ha remarcado, sobre el que no se están tomando las medidas necesarias. Por eso no ha dudado en afirmar que “si se está convirtiendo España en un desierto, tendremos que explicar a generaciones futuras, por qué no hicimos nada, por qué cuando la preocupación se elevó, no se dio respuesta”. Y aunque ha insistido en que el problema lo es tanto para el regante de Murcia como para el de Castilla-La Mancha, el Ejecutivo central sigue considerándolos “de primera y de segunda”, dejando a esta región fuera de las medidas contra la sequía.
El portavoz de la Junta ha apostillado que la situación es de “crisis nacional” y que Castilla-La Mancha, más allá de las denuncias públicas, también elevará al Congreso de los Diputados una iniciativa legislativa donde se defenderá el uso de las desaladoras como primera fuente de agua potable para consumo y para regar. “Si no, en menos de dos años, no habrá ni una sola gota de agua en Entrepeñas y Buendía”, ha avisado, en lo que será una “negligencia” del Gobierno de Rajoy, por “haber convertido nuestro país en un desierto”.