El Gobierno de Castilla-La Mancha ha aprobado ya la puesta en marcha de una línea directa de ayudas a fondo perdido para micropymes y autónomos en la región, dotada con 25 millones de euros. La actuación, que forma parte del Plan para la Recuperación de Castilla-La Mancha con motivo de la COVID-19, comprende 15 millones de euros en ayudas directas para trabajadores autónomos, para el apoyo en el reinicio de su actividad tras la paralización o ralentización obligada por el estado de alarma, y 10 millones de euros para las empresas de hasta 10 trabajadores.
El decreto que rige estas ayudas directas para micropymes y autónomos ha sido aprobado por el Consejo de Gobierno, y también se expone en el marco de las reuniones que la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, mantiene hoy con los grupos políticos de las Cortes regionales acerca del Plan. Las ayudas se habilitarán de manera inmediata
La línea de ayudas destina 15 millones al apoyo directo del reinicio de la actividad por parte de los trabajadores autónomos, con un pago de 1.500 euros por beneficiario, que se pueden destinar a los gastos derivados de su actividad, incluyendo el pago de las cuotas a la Seguridad Social, o gastos operativos corrientes.
“Queremos apoyar la vuelta a la actividad de los trabajadores autónomos con una ayuda directa que puedan destinar a los gastos que consideren más necesarios y urgentes, para asegurar la liquidez necesaria para poder levantar el cierre y volver a la actividad durante el proceso de desescalada”, ha señalado la consejera, que ha remarcado que se trata de un “empujón económico para aquellos que por las circunstancias de la COVID-19 tienen más dificultades para afrontar la recuperación”.
En el caso de las micropymes, las ayudas ascienden a 10 millones de euros. Las empresas con entre 1 y 4 trabajadores a tiempo completo percibirán una ayuda directa de 2.200 euros, que se eleva hasta 3.000 euros en el caso de las micropymes de entre 5 y 9 trabajadores, que componen la mayoría del tejido productivo de la región. Las ayudas se pueden dirigir a cualquier gasto operativo que suponga el reinicio de la actividad, incluido el pago de salarios o cuotas a la Seguridad Social.
Requisitos para acceder a la ayuda
Los requisitos para acceder a la ayuda en ambas líneas son haber visto suspendida su actividad por la orden de cierre derivada del estado de alarma, que provocó el cierre de las actividades no esenciales, o que la facturación, en el caso de no haber sido afectado por este cierre, haya caído en más de un 60% con motivo de la crisis. En ambos casos, tanto en la línea destinada a los trabajadores autónomos como en la que tiene como objeto las micropymes, el decreto establece como compromisos el reinicio y el mantenimiento de la actividad y del empleo durante los doce meses siguientes a la concesión de la ayuda.
La consejera de Economía, Empresas y Empleo ha enmarcado esta medida en el contexto de otras ya puestas en marcha por el Gobierno de Castilla-La Mancha, como la priorización en la resolución de las ayudas de Adelante Inversión e Innova Adelante, cuya resolución provisional se publicará al término del estado de alarma con la aprobación, entre ambas, de más de 800 proyectos con ayudas de 27,5 millones de euros; o la Línea Aval COVID-19, con avales por valor de 15 millones de euros.
Patricia Franco ha explicado esta y el resto de actuaciones del Plan de Medidas Extraordinarias para la Recuperación Económica de Castilla-La Mancha a los grupos políticos con representación en las Cortes regionales, PSOE, PP y Cs, en las reuniones que mantiene de manera individualizada con cada uno de los grupos a lo largo de la jornada de hoy. La consejera de Economía, Empresas y Empleo ha recordado en estos encuentros que el Plan cuenta con el consenso de los agentes sociales plasmado en el acuerdo firmado el pasado 4 de mayo por el presidente regional, Emiliano García-Page, con CECAM, CCOO y UGT.