Toledo acogió este fin de semana la última asamblea estatal de las Marchas de la Dignidad. Cerca de cuarenta personas de territorios como País Vasco, Castilla y León o Valencia, se congregaron para discutir sus acciones a futuro, así como la valoración de la última gran manifestación que tuvo lugar en Madrid el pasado 21 de marzo. La asamblea ha señalado estar muy satisfecha con la convocatoria, que llenó Colón y sus alrededores, a pesar de diversos factores que afectaron la convocatoria, como las elecciones andaluzas o el fin de semana festivo en Madrid. Así lo expresaba Olga Ávalos, portavoz de la asamblea en Toledo.
A pesar de que hubo cargas policiales, y las fuerzas de seguridad del Estado llegaron antes de lo previsto a supervisar la manifestación, las Marchas no han reportado ningún detenido. Eso sí, puntualizaba Ávalos, las asambleas dejaron claro que sólo se harían cargo de lo que pasaba hasta el fin de la convocatoria de la movilización. Sin embargo, todavía continúan los fantasmas de las detenciones de 2014, con más de una decena de detenidos, según señalan, que podrían tener condenas de mínimo tres años. En este sentido, las Marchas de la Dignidad redactarán un manifiesto en contra de la represión policial, además de la querella criminal que presentaron en febrero en contra de Cristina Cifuentes, entonces delegada de Gobierno en Madrid, y diferentes altos mandos policiales.
De cara al primero de mayo, la próxima fecha tradicional de manifestación, la asamblea de las Marchas de la Dignidad ha señalado que no apoyarán como movimiento ninguna de las movilizaciones que se llevarán a cabo, debido a que están convocadas por los sindicatos mayoritarios, que no están presentes en sus asambleas. Sin embargo, han señalado que quieren luchar porque se eviten las manifestaciones múltiples que suelen ocurrir en el día del Trabajo, y, por tanto, apoyan un frente común de protesta. “Nuestro lema es luchar por pan, techo, trabajo y dignidad”, sonreía Olga Ávalos, “por tanto saldremos a la calle en el uno de mayo. Pero queremos un frente unificado de las personas. Nosotros siempre sumamos, no restamos”.
De cara al otoño, tienen planteada la convocatoria de una huelga laboral, pero también social y de consumo. Si bien todavía no hay una fecha para estas nuevas jornada de protesta, sí tienen en claro que debe extenderse más allá del trabajo, debido a los altos niveles de paro. El papel que se plantea las Marchas de la Dignidad es concienciar a la gente para que se paralice el consumo el día, que todavía está por decidirse, en el que se plantee la huelga, y mostrar así la fuerza que tiene la “unidad popular” a la hora de resistir. Los sindicatos que sí están presentes en la asamblea, como CNT o SAT, serán los encargados de convocar este movimiento.