En el municipio ciudadrealeño de Navas de Estena ha caído como una losa la noticia de que finalmente esta localidad perderá su retén contra incendios. Así lo ha confirmado su alcalde, Isidro Corsino, lamentando que esta decisión del Gobierno de Emiliano García-Page sea un ‘deja vu’, puesto que el año pasado fue el Ejecutivo de María Dolores de Cospedal quien lo intentó mientras el actual presidente “decía que el retén no desaparecería”. El alcalde se refiere con ello al documento de encomienda de Gestión de los servicios de extinción de incendios del pasado 15 de marzo, donde no aparece el de Navas de Estena, para unificarlo con el de Retuera del Bullaque.
Según ha explicado el propio alcalde en las redes sociales, esta decisión de la Junta se ha adoptado para agrupar retenes en bases más grandes y optimizar recursos. Añade que el que lo haya decidido “no debe tener un mapa” aunque “sí un listado con la adscripción política de los municipios donde ha puesto las bases”.
Así, recuerda que Navas de Estena está “en el meollo” de lo que hay que proteger: la zona más despoblada de los Montes de Toledo y a 500 metros de la entrada a la figura de máxima protección: el Parque Nacional de Cabañeros. Por este acceso pasan la cuarta parte de los visitantes de este entorno natural, un “polvorín” que “ya estalló hace cuatro años, en 2012, con consecuencias nefastas”, en referencia al incendio que se produjo ese año y que afectó a 650 hectáreas del Parque Nacional. “Entonces todo eran duelos y declaraciones solemnes, pero todavía estamos esperando los resultados de la reclamación a la Junta por daños y perjuicios”.
Además, el alcalde explica que los 14 trabajadores del retén y sus familias suponen, en un municipio de 265 habitantes, la mitad jubilados, más de un 10% de los vecinos y la cuarta parte de la población activa. “Quitar el retén es poner la puntilla. Cerrar el pueblo y tirar la llave”, resalta, añadiendo que con ello se “completa” el Parque Nacional “de las grandes fincas y su caza, sin población que moleste”.
“Alejan de la entrada al Parque Nacional a los encargados de sofocar cualquier incendio”
El alcalde ha recibido el apoyo de la dirección regional Izquierda Unida. La responsable de Medio Ambiente, Rosa Prieto, ha apuntado que la decisión “es nefasta a ojos de cualquiera que conozca la zona”, ya que “supone alejar de la entrada del parque Nacional de Cabañeros a los encargados de sofocar cualquier incendio en una zona de altísimo valor ecológico”. Prieto recuerda que la presencia de ese reten es vital no sólo para la vida y el mantenimiento del pueblo, sino también para la defensa del Parque Nacional de Cabañeros ya que “llegar veinte minutos más tarde puede suponer la diferencia de pasar de un conato a un incendio de grandes dimensiones”. “Si ese retén se cierra, el Parque se queda más desprotegido en un año que promete ser muy caluroso”.
Finalmente, este partido considera que la política que pretende llevar la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, de unificar retenes en un territorio tan vasto, puede dejar sin efecto los “tímidos intentos de ampliación” de personal para esta y las siguientes campañas de incendios. “Es necesario conocer la realidad del mundo rural antes de tomar este tipo de decisiones, ya que la visión de los problemas es completamente distinta cuando se conoce el territorio”, concluye.