Fin de semana de Congresos Provinciales del PSOE en Cuenca, Guadalajara y Toledo. Han servido por un lado para renovar los órganos provinciales. En el caso de Cuenca, José Luis Martínez Guijarro deja la secretaría provincial tras casi 14 años para dejar paso a Luis Carlos Sahuquillo, mientras que en Guadalajara y Toledo continuarán al frente del partido Pablo Bellido y Álvaro Gutiérrez, respectivamente, con cambios en las ejecutivas provinciales.
Pero sobre todo las citas congresuales han facilitado que el líder socialista castellano-manchego, Emiliano García-Page, pudiese lanzar un mensaje de “unidad” del PSOE, cerrar filas en torno a Pedro Sánchez y cargar contra quien “destruyó” los servicios públicos regionales, en alusión a Dolores de Cospedal, advirtiendo del “retroceso” que supondría la vuelta de la número dos de Mariano Rajoy a la Presidencia castellano-manchega.
García-Page ha querido transmitir la idea de un PSOE “fuerte, honesto e insobornable” que además “ofrece certezas” a la gente de la que, dice, “sabe también lo que pasó cuando le dieron la oportunidad de hacerlo al PP y a Cospedal”. El socialista se desmarca de cualquier posición partidaria de un pasado reciente de pugna entre ‘susanistas’ y ‘sanchistas’ para hacer un llamamiento a evitar los “debates estériles” en el seno del partido e insistir en que, “una vez pasados los procesos internos, la unidad no es un deseo, sino una imposición moral”.
El líder socialista que se define como “lo contrario a Cospedal” habla ya en clave electoral tanto provincial, “para elegir a los mejores”, como autonómica o nacional. “Mi compromiso es que todo ese esfuerzo lo pongamos al servicio de la organización en España y que a la vuelta de un tiempo tengamos también a Pedro Sánchez como presidente del Gobierno”.
Sobre Castilla-La Mancha, ni una sola alusión a su alianza de Gobierno con Podemos aunque sí a los “acuerdos con todos los sectores sociales, y por eso la gente se identifica más con nosotros que con el PP”. Junto a eso, el convencimiento de que la batalla de cara a las próximas elecciones municipales y autonómicas “va a ser muy dura y muy ajustada” pero el PSOE sacará unos resultados “extraordinarios”.
El conflicto catalán no servirá de “excusa” a Rajoy con la financiación autonómica
García-Page ha aprovechado también para reforzar su mensaje en torno a Catalunya y pedir a los socialistas que defiendan la unidad de España “porque defender la unidad es defender la igualdad”. Por el contrario, ha señalado que “tras el independentismo se oculta el egoísmo. ”No es un problema de diferenciación cultural“.
En este punto ha enfatizado en que no va a admitir que el conflicto catalán sirva de excusa al Gobierno de Mariano Rajoy para retrasar la financiación autonómica. “Puede llegar a 1.000 millones de euros lo que el Estado le adeude a Castilla-La Mancha en concepto de dependencia y de infrafinanciación autonómica. Esto significa una forma de apretar las tuercas a la sanidad, la educación, las prestaciones sociales y las inversiones públicas, y no voy a admitir el chantaje de Montoro, el ministro responsable de la amnistía fiscal”, ha remachado.