La PAH de Puertollano se ha complacido en anunciar que ha comnseguido la dación en pago para dos familias de la ciudad, destacando además que para una de ellas ha conseguido además un alquiler social en negociación con la entidad bancaria correspondiente. Desde la Plataforma además han felicitado a las entidades bancarias, Unión de Créditos Inmobiliarios y Unicaja, por su sensibilidad a la hora de asumir los casos, cosa que no se han encontrado con las entidades financieras con las que suelen tratar de negociar.
Según informa miciudadreal.es, el caso negociado con Unión de Créditos Inmobiliarios es el de Antonio Gómez, de 30 años, que se encontraba en la fase final del procedimiento de hipoteca, que suponía su desahucio y la venta de su vivienda en subasta pública. Además su impago hipotecario provocaba también la caida y pérdida de bienes de sus avalistas, que en este caso eran sus padres, lo que dejaba a una familia absolutamente desamparada. Los medios legales tanto de la PAH como de los afectados firmaron en una notaría de Puertollano la dación en pago de su vivienda a cambio de la cancelación del crédito hipotecario.
“Si el procedimiento hubiese sido ejecutado, Antonio nunca habría podido levantar cabeza, incapacitado para cualquier actividad económicamente, con una deuda impagable y en un listado de morosos eternamente, además de perder la vivienda familiar de sus padres. Este caso demuestra que existen segundas oportunidades”
El otro caso, en el que además se ha obtenido un alquiler social con Unicaja, es el de Elvis Voloshchusk. En este caso se trataba de una deuda hipotecaria “muy elevada”, según la PAH, en un caso en el que además la familia había tenido una hija hace escasos días. Además de la cancelación de la deuda a cambio de la dación en pago, la PAH ha conseguido un alquiler social por tres años que garantizará que la familia Voloshchusk podrá seguir viviendo en el domicilio a un precio asumible.
La Plataforma ha recordado que, según el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, la legislación española viola los derechos fundamentales de las personas, ya que coloca al hipotecado en una posición desigual, y por ello piden la dación en pago retroactiva.