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Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

El nuevo cuartel de la Guardia Civil en Toledo, suma y sigue en la tensa relación entre Page y Pedro Sánchez

Un nuevo cuartel para la Guardia Civil en Toledo. Es otra de las razones que ha vuelto a abrir, aunque ahora de forma pública y notoria, la caja de los truenos de las tensiones internas en el PSOE toledano, mientras el Ayuntamiento de Toledo, gobernado por PP y Vox, asiste como espectador y también como colaborador necesario, en la escalada de discrepancias.

El Gobierno de Castilla-La Mancha que lidera Emiliano García-Page ha puesto patas arriba uno de los proyectos estrella de la que fuera alcaldesa (socialista) Milagros Tolón, al sugerir un cambio en la ubicación del nuevo cuartel para la ciudad al actual alcalde, Carlos Velázquez (PP).

Cuando todo parecía dispuesto para su ubicación en una parte de la ciudad conocida como La Peraleda, el Gobierno de Castilla-La Mancha ponía sobre la mesa llevar el cuartel hasta el barrio del Polígono, en la otra punta de la ciudad. En septiembre, Emiliano García-Page se reunió con el alcalde toledano y este mes de noviembre se confirmaba el acuerdo.

Lo curioso del caso es que el Gobierno autonómico no tiene competencias en la materia, pero se ha colado en una decisión que, según las fuentes relacionadas con el proyecto consultadas por elDiarioclm.es, tiene el claro objetivo de “enredar”. Una maniobra más, añaden las mismas fuentes, en las ya habituales desavenencias públicas de Page con el Gobierno de Pedro Sánchez.

Nada nuevo, aunque sí llamativo, porque se produce cuando todavía no ha terminado de configurarse el Gobierno de España que, entre otras cosas, tiene que confirmar o relevar a los delegados y subdelegados en cada territorio.

En el otro lado, el consejero de Fomento Nacho Hernando apuntaba para justificar su propuesta las buenas intenciones que tuvo el anterior equipo de gobierno socialista de Toledo y aseguraba que a la Consejería de Fomento se le ha encomendado ser “interlocutor” entre el Ayuntamiento de Toledo y el Gobierno de España, aunque sin desvelar la procedencia de la citada encomienda.

La Junta cree que el cuartel puede ubicarse en dos terrenos en el barrio del Polígono, uno pertenece a GICAMAN, empresa pública del Ejecutivo regional y otra del Ayuntamiento toledano que, aunque separadas, pueden unificarse eliminando un vial. Se trata de una espacio situado en una parcela frente al actual Hospital Universitario de Toledo, junto a las instalaciones del SESCAM, y muy cerca del Centro Comercial Luz del Tajo.

La idea del nuevo cuartel viene de lejos. García-Page era en 2007 alcalde de Toledo cuando anunció que se reuniría con el entonces director general de la Guardia Civil Joan Mesquida para hablar del asunto. En aquel entonces Page dijo que no le interesaba un cuartel situado “en medio del campo”. Pero el caso es que de eso ya había hablado otro alcalde, José Manuel Molina (PP), dos años antes. Ya puso sobre la mesa la necesidad del nuevo cuartel.

Casi 20 años después todo parece volver al punto de partida. El proyecto del cuartel no arranca y hasta tal punto se ha escenificado el desacuerdo, que la Consejería de Fomento ha tenido que suspender una reunión prevista para este viernes, que había sido convocada por el propio Gobierno regional, para avanzar en una propuesta de la que el Ministerio del Interior, según ha podido saber este medio, se enteró por la prensa.

La suspensión de la reunión se producía después de que la Guardia Civil comunicase que no iba a asistir, siguiendo las instrucciones del delegado del Gobierno de España, Francisco Tierraseca que, desde un cargo en funciones y a la espera de ser confirmado en el puesto, ha tenido que entrar al trapo.

Fuentes de la Delegación del Gobierno explican que hay dos razones para que la Guardia Civil no esté en la reunión. Por un lado, los aspectos a abordar en la reunión -de carácter urbanístico-no son competencia de la Benemérita. Y por otro,  hasta la fecha no existe ninguna propuesta concreta “por cauce oficial” que permita trabajar en la alternativa de la que ahora ha comenzado a hablarse. Y si todo sigue así, hay que volver a empezar.

El PP, pescador en río revuelto que apuesta por otra ubicación para el cuartel

El proyecto para construir un nuevo cuartel en La Peraleda se confirmó en la pasada legislatura. La alcaldesa entonces, la socialista Milagros Tolón, daba a conocer días antes de las elecciones del 28M que el proceso para la cesión de terrenos municipales, unos 37.000 m2, para las obras había finalizado. Venía dilatándose desde 2021.

Lo anunció durante los actos conmemorativos del 178 aniversario de la Benemérita. Anunció que antes de la finalización del mes la Junta de Gobierno aprobaría la cesión. Había ya sobre la mesa 17 millones de euros comprometidos por el Gobierno de España.

Milagros Tolón ganó las elecciones, pero no tuvo mayoría suficiente y un pacto de PP y Vox le arrebataron la alcaldía y el proyecto quedó en el limbo, a pesar de la cesión prevista a favor del Organismo Autónomo Gerencia de Infraestructuras y Equipamiento de la Seguridad del Estado (GIESE O.A), para su integración en el Patrimonio del Estado y su afectación al Ministerio del Interior-Dirección General de la Guardia Civil.

“La parcela la eligió la propia Guardia Civil”, ha dicho estos días la ahora portavoz en la oposición del Grupo Municipal Socialista, Noelia de la Cruz y además “urbanísticamente reúne los requisitos”.  

El PP no ha desaprovechado la ocasión de entrar en la ‘guerra’. El portavoz del Grupo Municipal Popular, José Manuel Velasco, coloca a la exalcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, en el disparadero para acusarla de “poner, desde Madrid, palos en las ruedas a la nueva ubicación del Cuartel de la Guardia Civil”.

Milagros Tolón es una declarada ‘sanchista’ de la que en ocasiones se ha hablado para relevar a García-Page al frente del PSOE castellanomanchego y como posible aspirante a presidir la Junta. En los mentideros toledanos es bien conocida su tensa relación con Page. Desde hace tiempo. Mucho.

Así que desde el PP tratan de pescar en el río revuelto tras saber que no habrá reunión para hablar del cuartel. Aseguran haber sido “testigos de cómo Tolón exigió de forma alterada que no se celebrara esta reunión convocada por la Junta para tratar la nueva ubicación del cuartel de la Guardia Civil, en dos conversaciones con el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska y con el secretario de Organización del PSOE de Castilla-La Mancha, Sergio Gutiérrez”, ha afirmado Velasco.

Velasco deja clara la “voluntad” del nuevo alcalde de Toledo Carlos Velázquez de “buscar una solución para que el cuartel permaneciese en Palomarejos”. De hecho, el edil había apostado por las antiguas instalaciones del Hospital Virgen de la Salud de Toledo, ahora en desuso.

El PP aprovecha también para justificar su ‘alianza’ con el Gobierno de García-Page en todo este culebrón. Velasco dice que “son las condiciones inviables de ubicarlos en La Peraleda y la urgencia de la situación lo que obligó a buscar una ubicación alternativa. No podemos consentir que se intente paralizar un proyecto que es bueno para Toledo y para la Guardia Civil”, ha manifestado.

Incide en su ataque a Tolón por “la gravedad de los hechos” y acusa a la ahora concejala y diputada en el Congreso de “seguir haciendo daño a la ciudad, a pesar de que el acuerdo con la Junta para ceder esta parcela, solucionaría un problema de décadas” y le insta a “pedir perdón”.

Comunicado tras comunicado, desde una parte y desde otra, el último llega desde el Grupo Socialista en el Ayuntamiento. Hablan de “maniobras” del alcalde, de “afán de protagonismo que retrasa la puesta en marcha de un proyecto para el que el Gobierno de Milagros Tolón ya había logrado el presupuesto, el consenso, los terrenos y la cesión de los mismos con el fin de poder iniciar las obras por parte del Ministerio de Interior”.

El debate se ha colado incluso en el Pleno celebrado este jueves. “Ustedes en campaña electoral -ha afirmado Noelia de la Cruz dirigiéndose a los concejales de PP y Vox- defendieron la ubicación en Palomarejos, pero ahora ya no les interesa revitalizar el barrio de Palomarejos, y ahora quieren llevarlo a otro sitio”.