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Preparan un “proyecto global” con propuestas de uso para la Venta de Borondo

Una de las visitas a la Venta organizadas por la asociación cultural

Carmen Bachiller

La Asociación Cultural  Venta de Borondo y Patrimonio Manchego de Daimiel (Ciudad Real) prepara un proyecto global para dar uso al inmueble. Así lo explica David Cejudo,  su presidente. “Le estamos poniendo números y la propuesta concreta queremos mostrarla a las administraciones y a agentes que puedan estar interesados en su restauración”.

El proyecto determinará distintas fases para acometer una intervención paulatina y lo  hacen al margen del “proyecto puntual para evitar que  la torre no se caiga porque cada vez que llueve nos ponemos a rezar. No sé si es una señal que siga en pie cuando han volado molinos en Consuegra o depósitos de vino en Villarrubia de los Ojos”.

En diciembre la Venta de Borondo cumplió diez años como Bien de Interés Cultural (BIC) y el daño es progresivo. “Hay pequeños desprendimientos porque los daños estructurales siguen ahí”. No es una denuncia nueva por parte de este colectivo que viene reclamando ayuda a las distintas administraciones y que el pasado año consiguió 6.000 euros del Concurso Semilla Soliss para invertir en el inmueble, que tiene siete propietarios, y que según la asociación “no tiene solvencia económica”.

“Está siendo muy complicado. Parte de los 6.000 euros que ganamos en el Concurso Semilla Soliss lo invertimos en verano para encalar el edificio, el ayuntamiento desbrozó los patios interiores, limpiamos los interiores. Se hizo un lavado de cara general”, explica David Cejudo.

“Después vimos la posibilidad de pedir una subvención a Parques Nacionales y en ello estamos. Tenemos un presupuesto de algo más de 10.000 euros y estamos viendo cómo reinvertirlo. Está siendo largo y costoso pero apasionante. No sabemos si podremos llegarlo a ejecutar”. Y es que, recuerda, “no es responsabilidad de la asociación asumir su restauración”, aunque trabajan en evitar que caiga la estructura.

“No hay mucha reacción por parte de las administraciones. Imagino que no lo considerarán prioritario. Esto es una lucha de fondo por nuestro patrimonio”, apostilla.

Una visita guiada para celebrar el Día del Libro

Como ayuda ‘extra’ para recaudar fondos, hacen visitas a la venta el primer domingo de cada mes si el tiempo lo permite. En 2017 pasaron por allí más de 300 personas. La próxima se celebra este fin de semana, el sábado 21 de abril. Es la II Ruta Cervantina 'Venta de Borondo'. “Vamos a conmemorar el Día del Libro en la Venta de Borondo”, explica Cejudo. La celebración, que requiere inscripción previa, arrancará a las 9 horas en la estación de Daimiel con una ruta por la sierra de unos seis kilómetros para después leer un capítulo de El Quijote en la propia venta y terminar con la degustación de un almuerzo típico manchego“.

Quiere ser el acto central “y el más institucional del año” por parte de la asociación y el objetivo “es alzar la voz para lograr su restauración”. La iniciativa se suma a otra que ha propiciado la reedición del libro ‘La Venta de Borondo’ de José Aranda. “Era necesario volver a leer el libro que se escribió en 1998 pero guarda muchos paralelismos con la actualidad. Recordar a la gente que en su día se preocupó por la Venta de Vorondo”. El libro, que estaba agotado, vuelve a publicarse gracias a la financiación por parte de la familia del escritor.

Se vende a 12 euros y la mitad de los beneficios se destinarán a las acciones que se realizan en la Venta de Borondo. “A Pepe Aranda le hubiese gustado el destino de ese beneficio”. Se puede adquirir en el Museo Comarcal de Daimiel o a través de la página web de la asociación.El libro incluye en esta ocasión un prólogo de la familia, de la asociación y una pequeña biografía del autor.

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