Ya es habitual en los últimos meses pero las causas siguen sin estar claras. Los usuarios del tren Avant entre Toledo y Madrid han vuelto a sufrir este miércoles un nuevo retraso que ha afectado a los dos primeros viajes programados: el de las 7:25 y el de las 7:55 horas. El primero ha salido con casi una hora de retraso -sobre las 8:23, al parecer por la falta de maquinista- y el segundo ha partido entre 15 y 20 minutos después de la hora programada, según traslada la Cadena Ser.
La situación ha generado un caos en la estación pues se han juntado en el anden -y dentro de la estación ya por la falta de espacio- los cientos de viajeros que toman estos dos trenes hacia la capital. Los primeros, a quienes en un principio les han indicado que el tren iba a sufrir un retraso de “mínimo 15 o 20 minutos”, han visto cómo comenzaban a subir al tren los pasajeros del de las 7:55 ante las indicaciones del personal de Renfe, que ha tenido que reclamar la presencia policial para calmar la tensión que se estaba produciendo.
Uno de los afectados que iba coger el tren de las 7:25 horas es Javier Ramos, quien se desplaza a Madrid por trabajo varios días por semana. “Muchos estaban ya optando por coger el coche para ir a Madrid y yo he llamado al trabajo para teletrabajar viendo la situación que se estaba produciendo”, explica este usuario que utiliza desde hace más de una década el Avant Toledo-Madrid y que hoy ha tenido que regresar a su domicilio sin poder reclamar la devolución del billete -tienen que transcurrir 24 horas para poder hacerlo-.
Cuando ha llegado a la estación, la zona de control no estaba abierta y a las 7:25 no había llegado el tren que realiza diariamente el viaje. Después, ha visto cómo subían antes al convoy doble (8 vagones en lugar de 4) los pasajeros que tenían billete a las 7:55 horas, momento en el que ha comenzado a producirse cierto caos en la estación. “A esa hora sabes ya que no llegas al trabajo y tampoco se puede anular el billete. Ahora depende de lo que quieran devolverte porque las reclamaciones en Avant no son igual que en el AVE”, apunta.
Este usuario toledano puso ya hace meses una reclamación del servicio que se presta en la línea, a la que todavía no han dado respuesta, pues sostiene que desde que se activó la rebaja del 50% del abono -lo que ha incrementado notablemente el número de viajeros-, “la calidad es la mitad”. “Hay un antes y un después”, dice Ramos, que afirma que no ha vivido estos inconvenientes de “forma tan recurrente” en los años que lleva utilizando este tren.
Por su parte, otro de los usuarios afectados, se quejaba en las redes sociales de la falta de “información por parte de Renfe o Adif”. “Vergonzoso. En breve (esperemos) se dará de alta la Asociación de Usuarios de Tren de Toledo”, apuntaba en un mensaje la usuaria de la línea Puertollano/Ciudad Real-Madrid, que también está sufriendo numerosos retrasos en los últimos meses.
Precisamente, este martes por la tarde, Adif informaba de que debido a una incidencia en la infraestructura de Yeles, los trenes que circulan por “las líneas de alta velocidad Madrid-Andalucía y Madrid-Toledo registran retrasos medios de 12 minutos. Técnicos de Adif trabajan ya para solventarla lo antes posible”, agregaba en un tuit.
Diagnóstico y causas
Cabe recordar que a finales del pasado mes de febrero Renfe inició una serie de reuniones de trabajo internas para elaborar un diagnóstico claro y abordar soluciones concretas a los numerosos retrasos que afectan desde principios de año a esta línea y a la que une Madrid con Puertollano y Ciudad Real. Sin embargo, dos meses después no se conoce aún el diagnóstico y continúan produciéndose retrasos como el que se ha vivido este miércoles.
UGT advierte de la “sobrecarga laboral” del personal
UGT Toledo ha advertido de “la sobrecarga laboral y del estrés” que sufre el personal de la estación“desde hace unos meses”. El sindicato señala que lo ocurrido este miércoles no es un hecho aislado, “esto sucede hace varios meses por distintos motivos de logística que están causando retrasos en uno de los trenes”. Por eso, han lamentado los problemas que la situación está provocando a las personas usuarias y a trabajadores y trabajadoras.
“Además de la preocupación de los usuarios que acuden a los operadores comerciales buscando respuestas, se une la posterior carga de trabajo para los trabajadores/as que tienen que gestionar las correspondientes indemnizaciones y hacer frente a la labor diaria de la venta de billetes”, recalcan.