Castilla-La Mancha celebraba este lunes concentraciones en varios puntos de la comunidad autónoma, tras la muerte de dos guardias civiles en Barbate (Cádiz), tras ser embestida su embarcación por una narcolancha.

David Pérez, de 43 años, formaba parte del Grupo de Acción Rápida de la Guardia Civil. Nacido en Barcelona, con mujer y dos hijos, había ingresado en la Academia de Baeza en el año 2008. Durante su carrera había sido distinguido con varias condecoraciones de la Guardia Civil.

Miguel Ángel González, de 39 años, era miembro de los Grupos de Especialistas en Actividades Subacuáticas (GEAS). Natural de San Fernando (Cádiz), tenía una hija. Ingresó en la Academia de Baeza en 2019 procedente del Ejército, donde cosechó varias condecoraciones militares.

Las concentraciones, un minuto de silencio, han sido convocadas por la Federación de Municipios y Provincias (FEMP) y ha contado, entre otras autoridades con la participación del presidente regional, Emiliano García-Page, y del presidente de la federación castellanomanchega y alcalde de Talavera de la Reina, José Julián Gregorio.

El Gobierno de Castilla-La Mancha ha trasladado su pésame a las familias, los amigos y los compañeros de los dos agentes de la Guardia Civil fallecidos en acto de servicio en Barbate durante la noche del pasado viernes. La portavoz del Ejecutivo autonómico, Esther Padilla, ha lamentado “el trágico suceso”, a la vez que ha deseado “una pronta recuperación de los heridos”. Por último, ha hecho un reconocimiento a la Guardia Civil “por la labor inmensa que hacen por la seguridad en nuestro día a día”.