El Partido Castellano-Tierra Comunera (PCAS-TC) ha celebrado, entre las plazas de Zocodover y de Padilla de Toledo, su tradicional homenaje a los comuneros toledanos en sendos actos públicos con música, reclamaciones políticas sobre el feminismo, la cultura y la historia.
De esta forma, el acto ha vuelto a llevarse a cabo como una fiesta de reivindicación de la identidad castellana, la de un pueblo con más de 1.200 años de historia con una cultura, un patrimonio artístico y ambiental y una lengua, que “se merece recuperar su unidad y protagonismo en una España federal y solidaria, así como en una Europa referente mundial de los derechos humanos, la sostenibilidad, la democracia, la participación, la economía social y la solidaridad internacional”.
En los días en que se celebran los 500 años desde la salida de María Pacheco de la ciudad y el fin de la Guerra de las Comunidades, los castellanistas vuelven a exigir en Toledo la vigencia del movimiento comunero, la primera revolución moderna de la historia que se adelantó más de 200 años a la Revolución Francesa y que ha supuesto un hito histórico en Castilla, España y Europa.
“El silencio prácticamente total y absoluto por parte de las administraciones locales o autonómicas en un aniversario que sería celebración por todo lo alto en cualquier otro lugar europeo, es un aliciente más para que desde PCAS-TC no desfallezcan en esta celebración”, señalan. Por ello, como viene siendo habitual en los últimos años, los castellanistas también han vuelto a pedir homenajear a María Pacheco con una estatua en su honor, que este partido lleva solicitando más de 30 años al Ayuntamiento de Toledo.
Asimismo, desde el PCAS-TC piden el reconocimiento de Castilla en el debate sobre la plurinacionalidad de España, que vuelve a estar abierto en medios políticos, evitando “nuevamente la marginación de los castellanos en el proceso de reforma del sistema político que España precisa, en los planes de emergencia para luchar contra la despoblación rural, que afecta a la mayor parte de las comarcas castellanas o en el fin del trasvase Tajo-Segura”.