Los trabajadores del 112 y 061 de Castilla y León irán a huelga con unos servicios mínimos superiores a la plantilla habitual

Habrá huelga el 15 y 16 de julio en los servicios telefónicos de emergencias del 112 y emergencias sanitarias 061, aunque con unos servicios mínimos superiores a la plantilla habitual. Los servicios mínimos impuestos por la Junta son “abusivos”: del cien por cien o más, lamentan los trabajadores. Además, han organizado una protesta que se realizará en la sede del 112, en el paseo Hospital Militar 24 (Valladolid) a las 11.00 horas. La manifestación se dirigirá hasta la sede de las Cortes.

La huelga ha sido convocada por unanimidad en el comité de empresa del 112 (6 de CGT, 2 de CCOO y una vacante) y por los tres delegados en el 061, que son de CGT. Esta será la primera huelga que plantean los propios servicios de emergencias en veinte años en lugar de ir vinculada a convocatorias de empresas del convenio colectivo.

Los sindicatos llevaban sin reunirse con la Junta de Castilla y León desde octubre de 2021. Este miércoles los delegados sindicales se han reunido con el viceconsejero de Sanidad, Jesús García-Cruces por la rama del 061. También tenían prevista una reunión con el consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, que ha cancelado su cita porque tuvo que desplazarse al incendio de Monsagro (Salamanca) pero les ha emplazado al 19 de julio.

La Junta de Castilla y León tiene privatizados estos servicios: Ilunion gestiona el 112 y Serveo, el 061. De hecho, firmó un contrato de emergencia para dar el servicio de mayo a diciembre de 2022 por tres millones de euros después de que la Justicia frenara el contrato que estaba en trámite. El Tribunal Administrativo de Recursos Contractuales estimó el recurso interpuesto por el comité de empresa, que denunció que no se subrogaba a los trabajadores. 

“Nos han impuesto servicios mínimos del 120%. El otro día había seis trabajadores donde ahora exigen doce”, lamenta Carlos Burgos, delegado de CGT en el 061. El Bocyl publicaba este miércoles que el número total de profesionales asignados como mínimos es de 25: catorce en la jornada de mañana, once en la vespertina y tres o cuatro en la de tarde/noche. Estos horarios se fijan, según la Junta, “para asegurar el mantenimiento de los servicios públicos esenciales y sin perjuicio de observar la regulación del derecho de huelga”.

“Algo no cuadra: somos servicios mínimos esenciales cuando hay huelga y por eso no tenemos derecho a huelga, pero a la vez somos televenta, porque vamos con el convenio de telemárketing, como si vendiéramos seguros”, reprocha el presidente del comité de empresa del 112, Domingo Largo.

Largo advierte que el modelo que se plantea para el 112 puede ser “un retroceso”. “Quieren que vayamos a turnos aleatorios como los del telemárketing”, lamenta el sindicalista de CGT. También reivindican una subida salarial y un acuerdo de mejora que remplace al de 2009. Además, quieren realizar los cuadrantes de días libres con un mes de antelación en lugar de trimestrales, como hasta ahora. “Todos los fines de semana hemos tenido a gente esperando siete minutos al teléfono. Que no sabes si es un infarto, un atragantamiento o algo menos urgente”, critica Burgos.

Jorge Machado, delegado de CGT en el 112, explica que solo un tercio de los trabajadores están en la 'ronda antiestrés' que permite una mejor conciliación e impide turnos de siete o diez días seguidos con horas extra. “También van a quitar las guardias que tenemos por si hay una emergencia, como una explosión o si se cae un edificio. Al de la guardia le computa como día trabajado y quieren suplirlo con horas extra. Algunos hacen once horas seguidas”, advierte.

Después de reunirse la semana pasada con el secretario general autonómico del PSOE, Luis Tudanca, Largo exigía a la Consejería que no “tirara a la papelera” el “acuerdo de mejora” que se alcanzó hace dos años. Entonces, se alcanzó en las Cortes el compromiso de garantizar medidas de mejora en las condiciones laborales y los parlamentarios reclamaban un nuevo marco laboral para los trabajadores específico para su sector, alejados del telemárketing.