La secretaria de Organización del PSOE de Castilla y León, Ana Sánchez, ha apuntalado la decisión de Ferranz de expulsar del partido a cinco de los ocho representantes en la Diputación de Ávila. La mandataria socialista ha defendido la postura del Comité Federal, a propuesta de la Ejecutiva provincial, en un proceso que, a su juicio, ha sido “absolutamente escrupuloso”.
La situación en el PSOE abulense se ha vuelto convulsa tras unas primarias en octubre de 2021 en las que la candidatura de Leticia Sánchez (alcaldesa de Navarrevisca) salió derrotada ante Jesús Caro (secretario general del PSOE de Ávila y alcalde Pajares de Adaja). Caro obtuvo el 53% de los votos, pero Leticia Sánchez —y el portavoz del Grupo Socialista en la Diputación, Pedro Muñoz.— acudió a la Justicia ante el “aumento desproporcionado” de afiliaciones en la comarca La Moraña, en la que está, entre otros municipios, Pajares de Adaja.
Para el bando de la regidora de Navarrevisca “en el último mes de 2020 y, sobre todo, en 2021, se afilió a más de 100 militantes en la Agrupación Local de La Moraña, cuyo voto ha sido determinante en el resultado de las primarias”. Y es que, como explicaron, solo hubo una diferencia de voto de 38 personas.
Entre estas acusaciones de afiliaciones en circunstancias extrañas, Leticia Sánchez, y el portavoz en la Diputación y alcalde de Cebreros, Pedro Muñoz, presentaron una demanda para que la justicia decida si se han producido la vulneración de los “derechos fundamentales” por la que se cuestionaba el funcionamiento democrático del proceso de primarias socialistas. El procedimiento iba dirigido contra Jesús Caro por considerar que se sumó “irregularmente a militantes en la agrupación de Pajares de Adaja” de donde pertenece.
Esta guerra interna, que parece que se va a saldar con un fuerte desgaste dentro del PSOE abulense, salta ahora del proceso de primarias a la Diputación. Pese a que Caro repitiese como secretario provincial, su bando no contaba con fuerza dentro de la institución provincial. Es por eso que se procede a sustituir a Pedro Muñoz, uno de los críticos, como portavoz por María de los Ángeles García Salcedo, exalcaldesa de Fontiveros. Tras decidir no acatar la decisión, el partido decide expulsar de sus filas a sus diputados díscolos. De los ocho representantes elegidos en 2019, solo dos - la propia García Salcedo y José Raúl Blanco- se mantienen dentro de la disciplina interna.
Para mostrar su apoyo a la decisión del sector de Caro, la secretaria de Organización del PSOE de Castilla y León se ha traslado a Ávila para mantener un encuentro con la ejecutiva provincial. En su comparecencia posterior, Ana Sánchez ha defendido que el proceso de primarias denunciando fue “impecable” y se produjo un “escrupuloso” cumplimiento de las normas.
Para la socialista zamorana, en declaraciones recogidas por Europa Prees, la fórmula de elección es una garantía “que no tiene ningún otro partido” por el que se eligen los órganos de dirección de forma “democrática”. “El PSOE tiene normas y se acatan”, ha apostillado.
Sobre ese cumplimiento de la disciplina, la secretaria de Organización de Castilla y León ha señalado que “ningún militante es más que nadie, son iguales en derechos y obligaciones”. Asimismo ha tenidos unas palabras para los cinco diputados expulsados a quienes ha agradecido sus años de trabajo en los que “sí compartían las firmes convicciones como socialistas” y a los que siguen dentro del PSOE en la Diputación de Ávila ha reconocido su “impecable comportamiento” y fidelidad.