La Guardia Civil investiga el hallazgo de los restos de un oso pardo muerto por un posible envenenamiento y encontrado por un cazador en un paraje próximo a Valle de Santullán (Palencia) en el parque natural Montaña Palentina, al norte de la provincia.
Un agente medioambiental de la Junta de Castilla y León y personal de la Fundación Oso Pardo informaron el pasado sábado de que un cazador había encontrado posibles restos de un oso pardo en un paraje próximo a la localidad de Valle de Santullán (Palencia), han explicado ese martes fuentes de la Guardia Civil.
Al día siguiente, un grupo formado por miembros de la Guardia Civil, de agentes medioambientales de la Junta de Castilla y León y una componente de la Fundación Oso Pardo se trasladó al paraje Revillanueva, en Valle de Santullán, un anejo de San Cebrián de Muda, en el interior del Parque Natural Montaña Palentina.
En el lugar hallaron, junto a un roquedo, en una zona cerrada de bosque de robles, diferentes restos óseos (vértebras, costillas, clavícula, fémur y cráneo), así como gran cantidad de restos de pelo de un ejemplar de oso pardo (ursus arctos), en buen estado de conservación.
Los agentes de la Guardia Civil junto a los agentes Medioambientales realizaron las actas de levantamiento de cadáver de animales, y activaron el protocolo por supuesto envenenamiento, para la remisión de las diferentes pruebas recogidas a los laboratorios de la Junta de Castilla y León (CRAS Burgos).
Las diligencias instruidas, así como el informe fotográfico de la zona donde se encontraron los distintos restos, han sido puestos a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Cervera de Pisuerga.