El presidente de Adif, Ángel Contreras Marín, ha instado al alcalde Valladolid, Jesús Julio Carnero, a iniciar los trámites para la demolición del viaducto del Arco de Ladrillo y evitar así una reparación temporal hasta que se inicie definitivamente la supresión del vial.
En una carta remitida al regidor, Contreras Marín ha indicado que el Ayuntamiento puede ganar tiempo y ahorrarse el dinero de la reparación si acomete la supresión de la infraestructura. La fórmula según el dirigente de Adif sería adelantar ese dinero que se reembolsaría al Consistorio por la Sociedad Valladolid Alta Velocidad al contemplarse dentro del acuerdo de integración ferroviaria de 2017.
Ante una negativa del equipo de gobierno a esta posibilidad, Contreras Marín ha planteado la posibilidad de que el Ayuntamiento “adopte una solución más económica para las obras de refuerzo”. El presidente de Adif ha recordado a Carnero “lo limitado” de la actuación el tiempo ya que solo está previsto que se mantenga el viaducto hasta que se licite y comience la ejecución de la obra, que previsiblemente será en 2025.
El regidor ha mostrado en varias ocasiones su escepticismo a cortar el viaducto al entender que no hay alternativas al tráfico debido a las obras en otros puntos que conectan por debajo de las vías del tren como el túnel de Labradores, cerrado durante otros seis meses más, y el viaducto de Daniel del Olmo que cuenta con restricciones al tráfico.
La misiva concluye apelando a que “la cooperación en la ejecución de este proyecto permitiría una mayor agilidad en la intervención, evitaría duplicidades innecesarias, optimizaría los costes y redundaría en el interés de las administraciones y entidades intervinientes y de los propios ciudadanos de Valladolid”.
El Ayuntamiento de Valladolid destinará dos millones de euros para paliar el deterioro de las defensas situadas en los bordes, que son antiguas y están obsoletas según la normativa vigente. El tiempo de ejecución se estima en 11 meses y se solaparía, si se cumplen los plazos, con la demolición. Desde el 31 de mayo los cuatro carriles se han reducido en dos para realizar los trabajos.
Adif presenta el proyecto: 22,68 millones sin IVA a realizarse en 22 meses
En la carta de Contreras Marín también se adjunta la documentación definitiva de la construcción del paso inferior del Arco de Ladrillo así como las tramitaciones realizadas y una presentación del mismo. Según lo presentado por Adil se destinarán 22,68 millones de euros en un obras que durarán 22 de meses con el fin de sustituir el paso elevado para vehículos y el inferior peatonal por un único paso inferior para viandantes, ciclistas y vehículos.
El objetivo, según la presentación, es mejorar la permeabilidad rodada y peatonal a ambos lados de las vías de ferrocarril, el aprovechamiento de los nuevos espacios urbanos generados para la ciudad, mejorar la movilidad sostenible en la ciudad y su área de influencia y mejorar la conexión peatonal.
Entre las actuaciones, además de la demolición, se protegerá el monumento de Arco de Ladrillo, paralelo al actual viaducto, y se tratará minimizar la interrupción del tráfico ferroviario y urbano. Se creará una plataforma temporal para el paso de los peatones.
Sobre el futuro paso inferior, se creará un cajón de 18 metros de ancho libre por el que pasarán cuatro carriles (con una altura de 4,5 metros) y las zonas peatonal y ciclista con 2,5 metros para cada zona. En total, la longitud del vial será de 175 metros.
El Ayuntamiento estudiará el proyecto antes de valorarlo
El concejal de Urbanismo y Vivienda, Ignacio Zarandona, ha comparecido en rueda de prensa para señalar que apenas han tenido tiempo para comenzar a analizar el proyecto al ser remitido el martes al mediodía. El edil ha señalado la complejidad de la documentación aportada por ADIF y ha pedido primero poder estudiar para luego poder informar sobre ello.
Entre las primeras valoraciones, Zarandona ha apuntado que es “fundamental” que el nuevo paso subterráneo sea compatible con el soterramiento aunque esta posibilidad no está dentro del acuerdo de integración. El concejal ha criticado la premura de Adif en entregar el proyecto cuando todavía estaban preparando alegaciones a “un documento previo” aunque ha reconocido que en el primer avance que esta entidad presentó ya reflejaba la solución a alegaciones previas.
Preguntado por la oferta del presidente de Adif de derribar cuanto antes o reducir costes, Zarandona ha rebajado la cuantía a gastar de los 2 millones de euros así como ha reducido el tiempo en hacer la obra de 11 meses a menos. Lo que sí ha dejado claro es que el Ayuntamiento no va a ceder en las obras para reparar las defensas de los bordes del viaducto del Arco de Ladrillo al considerarlas de urgencia y “no se puede perder tiempo”.