El hasta ahora portavoz del Grupo Municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Valladolid, Martín Fernández Antolín, ha explicado este miércoles que ha declinado la propuesta de la Directiva del partido en Castilla y León para ser de nuevo candidato a la Alcaldía de la ciudad debido a que considera que la formación 'naranja' se ha convertido en “una sucursal de políticas conservadoras” y a que en el Consistorio el Grupo municipal no ha trabajado “como equipo”.
Fernández Antolín ha atendido a los medios de comunicación en un 'canutazo' que ha ofrecido en el recibidor del Auditorio del Museo de la Ciencia antes de la celebración del acto del 20 aniversario de esta institución museística.
El que fuera candidato “independiente” por Ciudadanos en las elecciones municipales de mayo de 2019, cuando la formación obtuvo tres concejales en la Corporación, ha explicado que la pasada semana la Directiva autonómica del partido le ofreció encabezar la candidatura en los comicios del próximo 28 de mayo pero “tras un periodo de reflexión” ha decidido declinar.
El docente e investigador universitario ha explicado su decisión en primer lugar por que el partido al que representa en estos cuatro años “ha perdido” su doble alma “socialdemócrata y de liberalismo ortodoxo” para adoptar una posición “en muchos casos de sucursal de políticas conservadoras”, algo con lo que él no coincide.
Además, ha añadido que los tres concejales de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Valladolid ha trabajado “como grupo pero no como equipo”, algo en lo que ha reconocido que la responsabilidad también es suya.
Las consecuencias de esta decisión, que asegura que todavía no ha comunicado al alcalde de la ciudad, el socialista Óscar Puente, son que Martín Fernández Antolín deja la Portavocía del Grupo Municipal de Ciudadanos y también el partido, del que ya se ha dado de baja, aunque no el acta de concejal, pues pasará a ser edil “no adscrito”.
En este sentido, ha aseverado que “vuelve” de la política municipal “decepcionado” sobre todo con el proyecto de Ciudadanos ya que considera que se ha olvidado de que “tenía dos almas”.
La “intención” del hasta ahora edil de la formación 'naranja' “en este momento” es regresar a su actividad académica en la Universidad Europea Miguel de Cervantes, y así lo ha comunicado ya a este centro, pero no ha sido tajante en el momento de descartar si se plantearía concurrir a las elecciones municipales de mayo con otras siglas.
Al ser preguntado sobre la posibilidad de que el alcalde le ofreciera formar parte de la lista electoral del PSOE, Fernández Antolín ha respondido en primer lugar que esa pregunta considera que se le debería formular al regidor porque es “un futurible” propio de “fantapolítica”.
Puente tiene “un proyecto integral de la ciudad”
A continuación, ha añadido que en estos cuatro años de “aprendizaje” ha “aprendido a valorar” la política municipal y ha podido ver que “con las críticas que le podamos hacer” Óscar Puente ha “demostrado que tiene un proyecto integral de la ciudad”.
En cuanto a las razones de su marcha, Fernández Antolín ha incidido en que la decisión era “de tan importante calado” que no solo prima lo personal, por lo que ha explicado que se ha tratado de una “suma de todos los factores que han complicado la labor como portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento”.
“Mi convicción política y por otro la obligación debida de representar unas voces distintas a la mía que había dentro del Grupo Municipal y que había dentro de la formación, complicaban grandemente la forma de entender la política constructiva y propositiva en la que yo creía”, ha reflexionado.
Así, Fernández Antolín ha explicado en primer lugar que el partido, al que se afilió a finales de 2019 tras las elecciones en las que resultó electo concejal “dejó de lado el papel de partido liberal en el sentido europeo, en el que convivían dos almas, una socialdemócrata y una de un liberalismo ortodoxo, para adoptar una posición en muchos casos de sucursal de políticas conservadoras”.
“Conservador no, más bien lo contrario”
Por ello, ha recalcado que él no se identifica con esa ideología “conservadora” sino “más bien lo contrario”, de modo que ha interpretado que el “equilibrio político” de Ciudadanos que a su juicio contaba con “ese doble motor” se cambió por otro en el que solo había uno que “conducía a horizontes diferentes a los que inicialmente se habían planteado”.
Un ejemplo de ello, en su opinión, fue que en la negociación del Gobierno de Castilla y León en el verano de 2019, que finalmente se pactó entre Partido Popular y Ciudadanos, habría sido “una oportunidad extraordinaria para al menos haber podido negociar sobre unas bases de igualdad” pero “desde el primer momento se dejó fuera de la negociación a una de las partes”.
Por otro lado, se ha referido al “difícil” trabajo en el grupo municipal, aunque ha destacado que se han conseguido logros notables como que la corporación apruebe más de una veintena de mociones presentadas por Ciudadanos y que el partido negociase su apoyo a los presupuestos en dos de los cuatro ejercicios del mandato --2021 y 2023--.
Esa labor, según ha detallado, se ha visto complicada porque considera que ni él ni sus dos compañeros de grupo --Gema Gómez y Pablo Vicente-- han trabajado como equipo en estos cuatro años, algo en lo que él no elude responsabilidad.
Pero en este tiempo Fernández Antolín ha considerado que su trabajo ha sido difícil e incluso ha mencionado que “ha habido quien” ha intentado traer al ámbito municipal “presiones”, mensajes o consignas que considera más propias de la política autonómica o la política nacional, con la que entiende que “no tiene nada que ver” lo que se puede hacer en un barrio como “Belén o Pajarillos”.
En esa situación, el concejal vallisoletano ha asegurado que se ha visto “tentado” en alguna ocasión de “arrojar la toalla y regresar a la Universidad”.
En cualquier caso, ha destacado el trabajo “como grupo” en Ciudadanos en los acuerdos alcanzados con el equipo de Gobierno y otras formaciones, su papel en la creación del Grupo de Trabajo para afrontar la crisis sanitaria al inicio de la pandemia. “Fuimos nosotros los únicos que decidieron sentarse a negociar para dar la mayor estabilidad posible a la ciudad”, ha apostillado.
“Espero que con la mejor intención, con la separación que asumo del grupo, quienes creen en el proyecto de Ciudadanos puedan tomar así las decisiones que consideren oportunas, sin que yo ni nadie suponga un obstáculo a la hora de afrontar el futuro”, ha añadido el concejal, al tiempo que ha considerado que para estos tres meses que faltan no cree que genere “un roto” a sus hasta ahora compañeros.
También se ha referido a su papel, en este caso en primera persona, como presidente de la Comisión de Sugerencias y Reclamaciones, que ha considerado muy satisfactorio y de hecho ha manifestado su voluntad de solicitar al alcalde poder continuar al frente de la misma pese a su próxima condición de edil no adscrito.