Una exposición en la calle vuelve a obligar al gobierno de Ada Colau a actuar. Después de retirar el busto de Franco de delante del Born Centro Cultural hace unas semanas por la polémica suscitada, esta tarde de sábado el Ayuntamiento de Barcelona ha decidido poner fin a una muestra que los estudiantes de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Barcelona (UB) habían situado en el Fossar de les Moreres, un espacio emblemático de la Guerra de Sucesión donde estarían enterradas algunas de las víctimas del asedio borbónico de 1714 en Barcelona.
A raíz de la intervención artística esta mañana, diferentes personas han mostrado su disconformidad en las redes sociales hacia el espacio escogido para llevar a cabo la obra. Por el contrario, los autores de la obra han contado con el apoyo del grupo de investigación de la UB, Barcelona: Investigación, Arte y Creación (BRAC).
Ante la avalancha de críticas, una brigada municipal ha retirado los carritos antes de las cinco de la tarde. Incluso un colectivo, Moltes Mercès, había organizado para la tarde una concentración para reclamar al Ayuntamiento que desmontara la exposición. Ante la retirada por parte del consistorio, se ha desconvocado la protesta.
La obra artística ha tenido sólo unas horas de vida: el alboroto generado por la muestra en las redes ha obligado al consistorio a tomar medidas y finalmente ha decidido retirar la quincena de carros llenos de ladrillos que rodeaban el pebetero con la llama que arde en recuerdo de los barceloneses muertos en aquel conflicto. La instalación, que formaba parte del festival Llumb BCN, tenía por título Fuego de hogar, y quería representar el calor de una chimenea en un espacio urbano abierto.