Catalunya relaja las restricciones en la hostelería y el ocio nocturno. A partir de este viernes bares y restaurantes podrán cerrar media hora más tarde, a la 1.00 de la madrugada, y los espacios exteriores de terrazas de discotecas y bares musicales podrán abrir hasta las 3.00h. Se resiste por ahora la reapertura del interior de las discotecas pese a las demandas del sector.
La conselleria de Salud ha mantenido este lunes una reunión con representantes del sector del ocio nocturno para analizar una flexibilización de restricciones. Empresarios e instituciones como el Ayuntamiento de Barcelona han exigido una reapertura general después de los macrobotellones que se han sucedido durante el verano, pero el Govern se resiste a una reapertura general hasta que no se consiga una reducción significativa de los contagios.
La Federación Catalana de Locales de Ocio Nocturno (FECALON) ha asegurado que el Govern también planea una reapertura del interior de las discotecas a partir del 15 de octubre, con la exigencia de certificado COVID y limitaciones de aforo, un extremo que el Ejecutivo no ha confirmado.
En un comunicado, el Govern ha indicado que ha propuesto al sector “un horizonte cercano” para reabrir los interiores “con la posibilidad de usar el certificado COVID”, condicionado a que la situación epidemiológica “lo permita”.
Tras una breve reapertura a finales de de junio, cuando la Generalitat autorizó al ocio nocturno a reabrir hasta las tres de la madrugada, con pistas de baile habilitadas y sin necesidad de guardar la distancia de seguridad pero con mascarilla obligatoria, la escalada de contagios de principios de julio llevó al nuevo cierre del sector.
Todos los intentos de la Federación Catalana de Actividades de Restauración y Musicales (Fecasarm), la patronal del sector, para reabrir se han topado con la negativa de los tribunales. El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha rechazado en varias ocasiones las medidas cautelares planteadas por la patronal para revocar el cierre de discotecas y ampliar el horario de bares y restaurantes, que a día de hoy deben cerrar a las 00:30h.
A principios de septiembre el TSJC afeó a Fecasarm que pretendiera suspender las restricciones contra el coronavirus y sustituirlas por otras medidas sin aportar pruebas del perjuicio económico que causan al sector, y concluyó que no se ha acreditado una “eficacia similar” para el control de la pandemia y contener brotes epidémicos entre la restricción de la actividad en espacios cerrados de ocio nocturno y su apertura con control de acceso, como planteó la patronal.